Desde que estalló la crisis por el coronavirus en nuestro país, han sido constantes los gestos de solidaridad que han realizado tanto particulares como empresas para ayudar de múltiples maneras en una situación sanitaria tan crítica. Tal es el caso de Quadis, la mayor red de concesionarios y talleres oficiales de España, que ha cedido 25 vehículos al Institut Català de la Salut (ICS) para ayudar a luchar contra la Covid-19.
La compañía ha dejado altruistamente las furgonetas y los turismos a través de su servicio de alquiler Quadis Rent a Car. El objetivo es mejorar la movilidad de los equipos sanitarios y de emergencias. En concreto, dichas unidades están destinadas facilitar los desplazamientos en las visitas domiciliarias, el traslado de pacientes entre los centros y el transporte de material sanitario.
Antes de ser entregados a los centros hospitalarios, todos los ejemplares han sido desinfectados. La flota de vehículos ha sido distribuida entre el Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM), el Hospital Universitari Germans Trias i Pujol; la Mútua de Terrassa; la delegación tarraconense del Institut Català de la Salut; Badalona Serveis Asistencials y el Consorci Sanitari de Terrassa y del Maresme.
La iniciativa de Quadis se suma a la de otras empresas que han realizado acciones similares . De hecho, Hyundai fue la primera hacerlo. Justo después de que se declarara el estado de alarma, la filial de la marca en España puso en marcha la campaña #YoCedoMiCoche, por la que dejaba a varios hospitales de la Comunidad de Madrid su flota de vehículos para que el personal hospitalario pudiera realizar sus desplazamientos de forma segura.
Varias marcas automovilísticas también han dejado vehículos a hospitales en el marco de la iniciativa #YoCedoMiCoche
A esta acción solidaria posteriormente también se apuntaron otras firmas automovilísticas, como Suzuki, Nissan o el grupo PSA. Jaguar Land Rover, por su parte, cedió 18 unidades de todoterreno a Cruz Roja Española para reforzar la asistencia a zonas de difícil acceso.
Renault España donó al servicio público de Salud de Castilla y León (Sacyl) más de 26.000 mascarillas, casi 900 pares de guantes, unos 180 trajes-buzo y 66 pares de gafas. Asimismo, apoyó la iniciativa llevada a cabo por algunos de sus trabajadores para fabricar máscaras en impresoras 3D en sus propios domicilios. Para ello, les cedió una veintena de impresoras 3D y los consumibles necesarios para dar forma a estas protecciones faciales.
Seat, en colaboración con otras empresas y entidades, desarrolló un respirador para cubrir las necesidades de este tipo de material durante los momentos más críticos de la pandemia, cuando algunos centros hospitalarios rozaron el colapso. Con engranajes impresos en Seat, ejes de cajas de cambios y el motor adaptado de un limpiaparabrisas lograron dar forma al producto definitivo, denominado OxyGEN, y que se ha estado fabricando en la línea de montaje del León, en la planta de Martorell.
Tampoco hay que olvidar las acciones solidarias que realizan los ciudadanos anónimos. Algunos de ellos han cedido su propio vehículo para facilitar el desplazamiento del personal sanitario durante el estado de alarma. Esto ha sido posible a través de SocialMedics , una iniciativa llevada a cabo por la plataforma de carsharing SocialCar, en colaboración con el Institut Català de la Salut, Uber y AXA.