Viajar siempre es tentador, pero hay sitios que conviene evitar, sobre todo si acabas de casarte y buscas tranquilidad. El último mapa de riesgos globales, creado por Safeture y Riskline, pone sobre la mesa los destinos más peligrosos del momento, y sorprendentemente, uno de ellos es un clásico para lunas de miel: las Maldivas.
Cada vez más peligros
Europa también se está volviendo más insegura
El ranking de los lugares menos seguros lo encabezan Burkina Faso y la República Centroafricana, ambos atrapados en conflictos armados y una inestabilidad alarmante. También destacan ciudades como Bangui, Beirut y Gaza, donde la violencia y la precariedad convierten cualquier viaje en una mala idea.
Incluso Europa, que solía ser sinónimo de seguridad, ha perdido puntos. Países como Reino Unido, Francia, España y Suecia han pasado a la categoría de riesgo moderado, dejando claro que la tranquilidad absoluta ya no está garantizada. Aunque no son zonas donde haya un peligro evidente de morir, estos cambios son un toque de atención para quienes buscan destinos sin sorpresas desagradables.
Entre los que han logrado mejorar su situación están Argentina, Marruecos y China, que han bajado sus niveles de riesgo. Sin embargo, las Maldivas, un paraíso de playas idílicas para los recién casados, han pasado a la categoría de riesgo medio debido a tensiones políticas, extremismo religioso y problemas derivados del cambio climático, como inundaciones y erosión costera. Quizá sea momento de replantearse ese plan de viaje romántico.
En contraste, los destinos más seguros siguen siendo países como Suiza, Japón o Australia. Además, ciudades como Berna, Montreal, Melbourne y Doha lideran la lista de los lugares donde la tranquilidad está garantizada, al menos por ahora.
Además de los conflictos, el mapa destaca la importancia de la infraestructura médica, señalando a países como Yemen y Sudán como especialmente problemáticos. En estos lugares, incluso enfermedades tratables pueden convertirse en un grave peligro debido a la falta de recursos.
Para que nada salga mal
Hay que tenerlo todo en cuenta
Antes de lanzarse a hacer las maletas y planificar ese viaje tan especial, es importante tener en cuenta qué destinos pueden convertirse en una experiencia menos idílica de lo esperado. Aunque el mundo está lleno de rincones maravillosos, no todos garantizan la seguridad y tranquilidad que se busca en momentos tan únicos como una luna de miel.
Revisar informes como el mapa de riesgos globales puede evitar sorpresas desagradables y ayudarte a elegir un lugar donde relajarte y disfrutar sin preocupaciones. Al fin y al cabo, lo último que se quiere tras una boda es lidiar con conflictos, riesgos innecesarios o condiciones complicadas que puedan empañar el viaje.