Cate Blanchett volvió a coronarse como una de las invitadas mejor vestidas de la alfombra roja de los Globos de Oro. La australiana asistía a los primeros galardones cinematográficos del año como nominada, puesto que optaba a llevarse el premio a Mejor Actriz de Serie Limitada o Película de Televisión por su trabajo en la serie Disclaimer (Apple TV+).
A pesar de no llevarse el galardón, Blanchett dio una lección de estilo con su deslumbrante estilismo. Una vez más, la protagonista de Blue Jasmine demostró que no hace falta estrenar diseño para convertirse en una de las invitadas más elegantes de la alfombra roja.
Cate Blanchett con su vestido de Louis Vuitton en la alfombra roja de los Globos de Oro
La actriz se ha ganado el título como “reina del upcyling” por esta estrategia de reciclar sus diseños favoritos. En esta ocasión, la australiana aparecía en la 82 edición de los Globos de Oro con un vestido de Louis Vuitton que había estrenado hace menos de un año, en concreto, para el Festival de Cine de Cannes.
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De nuevo, Blanchett lanzaba un poderoso mensaje con esta creación brillante de Nicolas Ghesquière, en color dorado y que potenciaba su silueta gracias a su detalle drapeado en la zona del pecho y abdomen y un corte en la cintura que daba paso a una falda con una caída muy favorecedora. Además, tenía unas aplicaciones metálicas en la parte de los hombros que aportaba ese toque tan especial.
Cate Blanchett con su vestido de Louis Vuitton en la alfombra roja de los Globos de Oro
Muchos de los fans de Cate reconocieron rápidamente este vestido, puesto que lo había llevado en Cannes pero un poco diferente. Y es que la primera vez que lo lució esta parte de aplicaciones brillantes solo estaba presente en la parte de los hombros y mangas y la parte del pecho dejaba el protagonismo al tejido.
La australiana ha apostado en numerosas ocasiones por dar un nuevo aire a las piezas de firmas de lujo que llevan tiempo en su armario. El año pasado, ya dejó sin palabras con un top joya que en un primer momento había lucido con una falda a juego y que, meses después, combinó con unos pantalones de terciopelo.
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