El armario de invierno se llena de flores

Antes de llegar a París, la Semana de la Moda en Milán ya auguró una de las tendencias más románticas del próximo invierno: las flores. Lo hizo una de las leyendas vivas más célebres de la moda, el gran Giorgio Armani. 

El creativo, que aprovechó su desfile para celebrar su 90.º aniversario, presentó su colección Winter flowers como un mensaje de gracia y esperanza entrelazado con el poder y con la energía de la naturaleza y el ciclo vital de nuestro planeta. Blusas de seda delicada, pañuelos anudados a la cabeza o americanas con flores estampadas multicolor bajo un fondo azul marino. 

De la capital italiana hasta la ciudad del amor, el Loewe de J.W. Anderson se inspiró en los paisajes del pintor Albert York para estampar vestidos, faldas y sudaderas con flores rococó. Julien Dossena hizo para Rabanne todo un despliegue de claves sobre cómo combinar estampados de forma original como un auténtica portuguese girl.

Inspirándose en las ilustraciones de moda de los años veinte y el espíritu vibrante del círculo de Bloomsbury, Nicky Zimmermann presentó una colección de aire bohemio y encanto atemporal. La creativa canalizó esas vibraciones a través de los estampados florales y vestidos con capas vaporosas. 

Louis Vuitton se inspiró en el arte modernista de Antoni Gaudí y la ciudad de Barcelona para presentar su colección Crucero 2025, una línea donde los colores y detalles inspirados en la naturaleza tejieron una colección muy ‘arty’. 

Para Domenico Dolce y Stefano Gabbana las flores también forman una parte clave del universo de su firma. Amapolas, rosas rojas o claveles fueron los grandes protagonistas. Pierpaolo Piccioli rindió homenaje al poder y la belleza del color negro en un acto de dramatismo opulento para Valentino. En los looks destacaron vestidos con bordados artesanales con flores, capas con mucho volumen y transparencias que insinuaban la piel sin llegar a mostrarl