“Cuando un vestido está bien hecho sirve para bailar y para montar a caballo”, solía decir Coco Chanel. La gran modista y diseñadora francesa se aficionó al mundo de la hípica durante sus estancias en casa de su amante, Étienne Balsan, un rico heredero que pasaba su tiempo libre criando caballos y jugando al polo. Fue precisamente Balsan, a cuyas invitadas Coco les hacía sombreros y pequeños accesorios, quien le presentó a Gabrielle Chanel su gran amor, Boy Capel, hombre de negocios y polista que falleció en un trágico accidente automovilístico. Más adelante, Coco mantuvo un romance con el duque de Westminster, un aficionado a las carreras de caballos que ella definía como “la elegancia en persona: lleva las mismas chaquetas impecables de hace 25 años”, tal y como recoge Isabelle Fiemeyer en su libro Chanel Íntima.
Más de 50 años después del fallecimiento de Gabrielle Chanel, la hípica sigue siendo un gran motivo de inspiración para la firma. Solo hay que recordar el desfile de alta costura primavera-verano del 2022 que abrió Carlota Casiraghi vestida como una amazona de competición y trotando por la pasarela erigida en el Grand Palais Éphémère de París. Su madre, la princesa Carolina de Mónaco, era íntima amiga del difunto Karl Lagerfeld y su abuela, Grace Kelly, era, como ella, una gran apasionada de la equitación.
Cuando un vestido está bien hecho sirve para bailar y para montar a caballo”
La imagen de Casiraghi en chaqueta-joya de tweed y botones de pedrería dio la vuelta al mundo, “demostrando la emoción estética, la exclusividad y la búsqueda de la perfección de la Alta Costura”, explicó a la prensa Virginie Viard, la actual directora creativa de Chanel y gran amiga de los Grimaldi. Y añadió: “Partí del trabajo de Coco Chanel en los años veinte, cuando dio un giro contemporáneo al uniforme de polista, al acolchado de las chaquetas de jockey, que luego usaría en el icónico bolso 2.55, y asistió a numerosos certámenes ecuestres en traje y corbatín”.
Décadas antes, Farrah Fawcett ya había lucido un tres piezas con corbata para montar a caballo, al igual que ha hecho en ocasiones Beatriz Ferrer-Salat en competiciones de la modalidad de doma clásica. Replicando este estilo, encontramos las propuestas de Pomandère, Sandro, Yerse y otro mito de los partidos de polo, Ralph Lauren, quien suele posar para los medios acompañado de sus caballos.
Ralph Lauren propone este look de aire refinado, un clásico actualizado inspirado en diseños de Coco Chanel
Son muchas las celebridades que practican hípica desde pequeñas, desde la infanta Elena a Marta Ortega, Athina Roussel Onassis, Kate Middleton, Jennifer Gates y la hija de Bruce Springsteen y Patti Scialfa, Jessica. A ellas se unen históricamente la difunta reina de Inglaterra y Bianca Jagger, que posó para una fotografía histórica en su trigésimo cumpleaños con el caballo blanco que le regaló para la ocasión Steve Rubell, director de Studio 54.
Otro asiduo a Studio 54 era Yves Saint Laurent, quien puso de moda la safari jacket y también hizo desfilar en múltiples ocasiones a sus modelos en breeches o botas altas de equitación, parecidas a las que hoy llamamos mosqueteras, que este otoño vemos en múltiples propuestas de distinta estética por parte de Hermès, Jimmy Choo, COS y la firma española Mascaró. Fundada en Menorca en 1918, esta empresa familiar ha creado para esta nueva temporada una colección totalmente inspirada en los caballos, protagonistas de las grandes fiestas populares de esta isla balear, con pantalones blancos, bar jackets, camisas blancas y conjuntos en blanco y negro. Para fiestas al atardecer, Mariandrée Gaitán cuenta con combinados de blusa y falda con tirantes, y Prada con maxivestidos de lo más glamurosos.
Una nueva colección de la firma española Mascaró totalmente inspirada en los caballos
Otras firmas legendarias asociadas a la equitación son La Martina; LOEWE, con su bolso imperecedero Amazona y sus trench cortavientos, como el de doble cuello que está causando furor esta rentrée; y, evidentemente, Hermès. “Su fundador, Thierry, dio sus primeros pasos en 1837 elaborando bridas y arneses de primerísima calidad para abastecer a la aristocracia. Casi un siglo después, en 1922, nacía al primer bolso femenino de cuero junto con otros complementos con la temática ecuestre como leitmotiv”, expone el periodista Eloy Valero, colaborador del programa De Moda en el canal 4TV.
“Las creaciones de Hermès han sido usadas por otras grandes estrellas de este deporte, como los españoles Carlos Gómez o Sergio Álvarez Moya. En el Reino Unido, esta casa francesa tiene una gran presencia en múltiples competiciones, y especialmente en la carrera de obstáculos Aintree Grand National, una de las más prestigiosas del mundo”, añade, por su parte, Michelle Connors, estilista para Grazia UK, declaraciones a las que se suma el fisioterapeuta de jinetes Hugo Moreno, con una larga experiencia en los torneos del Club Hípico de Sotogrande en Cádiz, uno de los paraísos desde hace décadas para la práctica de la hípica: “Lo fundamental es que los productos estén adaptados a la era actual y, sin duda, el mundo del lujo, como en el caso de Hermès, lo demuestra con creces cada año”.
Horsebit fue el primer bolso de Gucci decorado con los símbolos de la marca, un anillo doble y una barra
Otra firma que siempre ha ido al paso del caballo en el mundo de la moda es Gucci. “Su fundador, Guccio, creó su imperio fabricando marroquinería y equipajes íntegramente en cuero y dada la pasión de su exclusiva clientela por la equitación, años más tarde, la firma lanzó Horsebit, su primer bolso decorado con un anillo doble y una barra como elementos ecuestres que se han convertido en uno de los símbolos de la marca”, apunta Valero. Para este otoño, la Horsebit Chain Bag ha sido presentada en una nueva variedad de combinaciones de colores e interpretado en manifestaciones acolchadas, de piel de oveja, de cristal y de cuero en contraste.
La moda flamenca y el caballo siempre han estado interrelacionados, por lo que encontramos numerosas colecciones que buscan unir máxima elegancia, tradición y patrimonio, tanto en España como en países latinoamericanos, como México, como observamos en las creaciones de Benito Santos.
La Horsebit Chain Bag de Gucci, hecha de piel de oveja, de cristal y de cuero
La decoración de los clubs ecuestres también cuenta con piezas de diseño perenne. Es el caso “del taburete Artek Stool 60 diseñado por Alvar Aalto hace ya 90 años y también de otras preciosidades del interiorismo como su taburete 307, ambos producidos por Vitra. Otra joya que siempre desprende elegancia en todo salón rústico es la chaise longue LC4 con estructura de metal y asiento de cuero diseñada por Le Corbusier, Pierre Jeanneret y Charlotte Perriand para Cassina”, nos cuenta la interiorista con estudio en Málaga, Marga Salas.
Chaise longue, diseñada por Le Corbusier, Jeanneret y Perriand para Cassina
Asimismo, para cualquier espacio que quiera rezumar esa atmósfera ecuestre, contamos con las alfombras de Nanimarquina, en especial las de su colección Chillida, en blanco y negro, y las de tonos marrones de su línea Wellbeing, todas ellas emblema de confort y personalidad. Para aportar además un toque aún más especial, destacan los cojines de ante y flecos de Westwing, y la bombonera Apple de Reflections Copenhagen. Ya lo decía Nuno Oliveira, considerado el más grande maestro del arte ecuestre del siglo XX: “Hay dos cosas en la equitación: la técnica y el corazón”.
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