Abarth nació en 1949 en Bolonia como una filial de Fiat especializada en la preparación de automóviles para la competición. La marca del escorpión, por tanto, lleva el automovilismo deportivo en sus genes.
La inexorable marcha hacia la electrificación del mercado europeo también ha acabado afectando a pequeños productores como Abarth, pero de forma distinta. Es decir, el primer Abarth completamente eléctrico sigue siendo un automóvil divertido, exclusivo y deportivo, aunque emplee electricidad para moverse.
El eléctrico mantiene los rasgos de un deportivo como la aceleración y la velocidad en carretera
La receta, parecida a la de los modelos Abarth 595 y 695 -que siguen a la venta- recoge los valores de la mítica marca italiana: agresivo diseño exterior, equipamiento completísimo con disponibilidad de opciones exclusivas, puesta a punto específica enfocada a la deportividad y más potencia. En este caso, más potencia que el Fiat 500e del que toma la base.
El carácter deportivo queda reflejado en detalles como la tipografía en gris titanio oscuro, las llantas de aleación de nuevo diseño, las líneas deportivas del faldón lateral o las carcasas de los retrovisores en gris mate. Además, más sorprendente si cabe, incorpora un sonido específico que reproduce el tono de una guitarra eléctrica dentro del habitáculo cada vez que el conductor enciende o apaga el coche.
Disponible también en versión Cabrio para los amantes de la conducción al aire libre, el 500e no decepcionará a los incondicionales de la marca, ni por sus prestaciones ni por su sonido.
El potente motor eléctrico de 154 CV y la mejor distribución del peso por la situación de la batería proporcionan una conducción ágil y emocionante. Y presume de tener la mejor aceleración de su categoría (7 segundos para alcanzar los 100 km/h). Cuenta, también, con los modos de conducción Turismo, Scorpion Street y Scorpion Track y un generador de sonido que reproduce la melodía del motor Abarth de gasolina. Y para completar la experiencia de sonido, incorpora un equipo de audio premium JBL con siete altavoces que mantiene la adrenalina en los niveles adecuados.
El 500e no solo es rápido en carretera. Para minimizar el tiempo de espera mientras recuperamos autonomía eléctrica, está equipado con un sistema de carga rápida de 85 kW que permite recuperar 40 km en solo 5 minutos. O alcanzar el 80% de la carga en 35 minutos.
En suma, Abarth apuesta por un estilo irreverente y audaz, con una experiencia de conducción tan estimulante como la proporcionada por los automóviles con motor de gasolina. Nuevos tiempos.