La salud mental positiva es esencial para mantener una vida estable. Tal y como ocurre con el cuerpo, el cerebro también sufre las consecuencias del día a día, y tan pronto como nos despistamos podemos estar sufriendo de agotamiento, dolores, pulsaciones, ansiedad, nervios y muchas más afectaciones. El cuerpo debe estar limpio, pero la mente también merece una atención especial para no generar nuevas dificultades.
Uno de los expertos más conocidos en España sobre la materia es Mario Alonso Puig, doctor y fellow en cirugía por Harvard University Medical School, quien a menudo comparte sus conocimientos en entrevistas, conferencias y demás actividades. Uno de los aspectos que ha compartido recientemente, en su perfil de TikTok, es la idea de despertar las capacidades dormidas de cada persona, para que puedan desarrollar su máximo potencial.
“Yo estoy en este mundo para ser un humilde despertador, es decir, todo lo fundamental lo tiene cada persona. Lo que pasa es que hay que despertar eso que está dormido, ¿no? Entonces a mí me gusta describirme como alguien que quiere despertar lo que está dormido”, comentaba, recordando también su época de cirujano y cómo aplicaba distintos aspectos como la ciencia, la tecnología y, principalmente, la conversación.
“Una de las cosas que más aplicaba era la conversación, porque yo sabía, siguiendo a nuestro padre en medicina, Hipócrates, que los verdaderos recursos están en el organismo y que cuando una persona está ilusionada, tiene fe en que se puede curar, es capaz de sacar a flote cosas que de otra manera no sacaría a flote. Entonces el convencimiento, la convicción, la certeza de que esos recursos están, ha sido algo que siempre me ha llevado”, detallaba.
Activar el cuerpo
“Y luego eso no solo se extiende en el campo, la medicina se extiende en muchas otras cosas donde el potencial humano existe, lo que pasa es que hay que conectar con él, hay que despertarlo, hay que desplegarlo y ayudarlo a florecer”, reconocía. Unas declaraciones similares las dejó semanas atrás refiriéndose al aspecto más físico del cuerpo. Según sus palabras, se pueden afectar elementos concretos para aumentar nuestro potencial.
“Entonces veo otra dimensión, pero primero he tenido que querer mirar de otra manera. Y nos da miedo mirar, ¿por qué nos da miedo mirar? Porque no nos fiamos de lo que vamos a ver. Tenemos una concepción a veces tan pobre del ser humano, cuántas personas han dicho: ‘No, yo es que no quiero mirar dentro porque no quiero ver todo lo malo que hay en mí’. Oye, perdón, si tú quieres ver tu luz, primero tendrás que atravesar tu cruz”, sentenciaba.