El caso Edwin Castro: Ganó el mayor premio de loterías de la historia y fue acusado de robo
Loterías
Las fuerzas judiciales alegan que encontrar al verdadero propietario del boleto ganador es "casi imposible"
El ganador ha sido demandado tras gastar parte del premio.
Existen innumerables historias únicas sobre ganadores de la Lotería, y la de Edwin Castro es una de ellas. El estadounidense fue identificado como ganador de la increíble suma de 2.000 millones de dólares, todo un sueño.
Gracias al sorteo de PowerBall, Castro se hizo con la máxima suma en la historia de la lotería en Estados Unidos. Sin embargo, su felicidad desapareció por completo cuando salió a la luz que su boleto fue robado.
El sorteo de la Powerball es de los más populares.
En un primer momento, Castro utilizó su premio para comprar viviendas de lujo: se hizo con una mansión de 25.5 millones en Hollywood Hills, otra de 4 millones en Altadena, y una tercera en Los Ángeles por la increíble cifra de 47 millones de dólares.
Sin embargo, su opulento estilo de vida se ha visto amenazado. José Rivera ha demandado al ganador, llegando a afirmar que Castro cobró ilegalmente el dinero del boleto tras ser robado por Urachi F. Romero, su antiguo casero.
El supuesto ladrón ha identificado a Rivera como la persona que compró el boleto, admitiendo que lo tenía en su poder antes que Castro, el cual llegó a cobrarlo. Por otra parte, la oficina de Loterías de California lo tiene claro: el premio pertenece a la persona que posee el boleto ganador, sin importar quién lo compró.
Tal y como indica la demanda, Rivera compró el boleto ganador el pasado mes de noviembre, pero ese mismo día Romero le robó el boleto. Aparentemente, Romero era el casero de Rivera, y su relación era cordial hasta que el boleto desapareció.
Con vistas a defender su inocencia, el casero asegura no haber robado el billete: ¿Cómo yo robo un boleto que vale miles de millones de dólares y yo no tengo ni uno?”, alegó Romero.
Este embrollo ha supuesto un auténtico drama legal, llegando a ser considerado una "farsa" según la abogada Jamie E. Wright, que afirma que encontrar al verdadero propietario del boleto ganador es "casi imposible".