Detenidos por robar 24 toneladas de cobre de una línea ferroviaria valenciana y enviarlo a China

Sucesos

Los implicados enviaban el cobre obtenido al país asiático a través de contenedores marítimos para su fundición, causando una pérdida económica valorada en más de 300.000 euros

Guardia Civil

Cableado de cobre robado de la línea ferroviaria 

Guardia Civil

La Guardia Civil ha detenido a siete personas por el robo de más 24.000 kilos de cableado de cobre sustraído en la línea ferroviaria 300 de València para enviarlo a China, lo que causó un perjuicio de más de 300.000 euros.

Los delitos han tenido lugar en la línea ferroviaria 300 denominada Factoría Ford - Font de Sant Lluis donde cuatro de los detenidos accedían forzando las puertas del perímetro de la vía.

Los implicados trepaban por los postes de la catenaria y cortaban el cableado de cobre

Según un comunicado de la Guardia Civil, tras escalar por los postes de la catenaria, lograron cortar el cableado de cobre de la línea y sustraer unos 7.253 metros, con un peso de 24.780 kilogramos. El valor económico de la reparación y reposición del cableado sustraído ascendería a casi 320.000 euros.

Durante la investigación se encontró el lugar de venta del cableado sustraído en la localidad de Silla. Esta empresa compraba el material sustraído sin dejar constancia administrativa de las compras ni registros oficiales.

Además, abonaban el pago del cobre ilícito en dinero en efectivo a las personas que se lo llevaban. Se ha podido demostrar que el propietario y algunos trabajadores de la empresa camuflaban el cobre sustraído entre el material tratado legalmente y con su trazabilidad correcta. Después enviaban por medio de contenedores marítimos el cobre sustraído a empresas de China para su fundición. Los agentes han logrado recuperar 4.271 kilogramos del cableado sustraído, que han sido devueltos a la empresa responsable de la reparación de la línea ferroviaria.

Los detenidos estaban estructurados en dos grupos: uno que se encargaba de localizar el mejor lugar para sustraer el cableado y otro dedicado a dar salida al cobre. Utilizaban una mercantil con aparente actividad legal para mezclar el metal sustraído con el legal para no ser detectado por las autoridades y, posteriormente, enviarlo a China para su venta.

Los hechos cometidos son dos delitos de robo con fuerza y dos delitos hurto, además de un delito de receptación de material sustraído y un delito de pertenencia a grupo criminal, cometidos en los términos municipales de Picanya, Silla, Beniparrell y Picassent.

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