El pleno del gobierno valenciano aprobó ayer de manera formal la prórroga de los Presupuestos de la Generalitat valenciana ante la imposibilidad de ratificar antes de final de año las cuentas del próximo ejercicio. La decisión no ha sorprendido. El ejecutivo que preside Carlos Mazón lleva semanas rehaciendo los presupuestos que se iban a presentar dos días después de la terrible dana, que dejó en papel mojado todas las proyecciones de ingresos y gastos del Consell. El proyecto de ley no llegó a trasladarse a Les Corts para su negociación y no se ha vuelto a agendar una nueva fecha.
Entre medias, Vox dijo que suspendía todas las negociaciones para apoyar las cuentas autonómicas y el PSPV, que se había prestado a echar una mano y facilitar la aprobación de las mismas en el Parlamento -hay que recordar que Mazón no tiene mayoría-, se ha desdicho a medida que se han ido descubriendo fallos en la gestión. Al final, la relación entre PP y PSOE se ha embarrado.
Quien también parece que ahora se desdice es Vox. Pese a que el secretario general de la formación a nivel estatal, Ignacio Garriga, anunció la suspensión de cualquier negociación, el síndic de esta formación en el Parlamento autonómico, José María Llanos, señaló ayer que en una situación como la que vive la Comunidad Valenciana es “especialmente” necesario que haya unas nuevas cuentas. Por ello, dijo claramente que “negociación habrá. Otra cosa es que no vamos a ser la muleta del PP”.
Así, avanzó que la negociación tendrá que girar en torno a las directrices de Vox, que va a negociar “a máximos” todo lo que esta formación entiende que es necesario para la reconstrucción.
Parece que a medida que se va acercando el momento, la predisposición de Vox, pese a las amenazas que llegan de Madrid, son mejores. En esta línea, el portavoz del PSPV, José Muñoz, ayer ya daba por hecha la entente entre los dos antiguos socios de gobierno para sacar adelante las cuentas de 2025. El mandatario socialista lamentó que, ante “el chantaje racista” de Vox respecto a las cuotas migratorias, Alberto Núñez Feijóo “ya ha asumido que prefiere tener presupuestos autonómicos que respetar a un mínimo de derechos humanos”. Compromís nunca puso en duda que PP y Vox llegarían a un acuerdo.
'Sine die'
Todavía no hay fecha para que las cuentas lleguen a Les Corts, pero el Consell dice que se negociarán en enero
Pese a ello, los trámites para aprobar las cuentas siguen sin un calendario claro. Ayer la Junta de Síndics aprobó que enero fuera hábil para debatir iniciativas respecto de la dana, pero no se pusieron encima de la mesa fechas para el presupuesto. Únicamente la idea de hacer un pleno extraordinario el 15 y 16 de enero sin relación alguna con las cuentas. Y es que el Consell no ha dicho todavía cuándo piensa entregar al Parlamento el proyecto de Presupuestos.
Preguntada al respecto, la vicepresidenta primera y portavoz del Ejecutivo, Susana Camarero, reiteró que la intención es negociar con todos los grupos parlamentarios a partir del mes de enero (sin más concreción) con el objetivo de “garantizar” el dinero que necesita cada conselleria para la recuperación de las zonas afectadas.