Ford ha convocado a su plantilla en Valencia para iniciar un periodo de consultas sobre un nuevo Expediente de Regulación de Empleo. La reunión, que se celebrará el próximo día 28 de mayo, se da a conocer en la misma semana que la empresa ha clarificado parte de su nueva estrategia para Europa. La multinacional lanzará a mediados de 2027 un nuevo vehículo producido en Valencia, un modelo híbrido que le obliga por tanto a renunciar a las ayudas del Perte del vehículo eléctrico que ya había aceptado.
El anuncio de la reunión lo ha hecho el sindicato UGT-PV, que insiste en que “para acometer la larga travesía hasta que llegue el nuevo vehículo a las líneas de producción”, la empresa deberá especificar en cuánto cifra el excedente definitivo de personal, “si es que lo hay”, matiza.
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El ERE que ahora plantea la empresa es el segundo en poco tiempo, ya que la pasada primavera la empresa y el sindicato ya negociaron un ERE para el 20% de la plantilla que estableció prejubilaciones a los 53 años. La reestructuración afectó a 1.144 trabajadores.
A pesar de que el rumbo de la empresa se desmarque de la electrificación total en su planta valenciana, para el sindicato mayoritario el “Acuerdo por la Electrificación”, firmado con la dirección en Europa, sigue siendo la “herramienta fundamental” por la que la dirección mundial de Ford ha reafirmado su apuesta por Valencia.
Es por ello que defienden que, de aquí en adelante, la Comisión del Observatorio para la Electrificación deberá cobrar protagonismo “para analizar la situación socioeconómica, así como qué medidas de flexibilidad son necesarias, o no, en cada momento”.
UGT-PV dice que la Comisión del Observatorio para la Electrificación deberá “cobrar protagonismo” próximamente
El sindicato insiste en que, a pesar de que haya cambiado el modelo de coche y las fechas del proceso, lo importante es que la factoría de Valencia “tendrá vehículo y suficiente carga de trabajo, situación que lamentablemente no se producirá en todas las fábricas europeas”.
Actualmente, la empresa en Almussafes tiene vigente un ERTE que supone que se trabaje a la mitad de su capacidad, con un solo turno en la planta de montaje de vehículos, motivado tanto por el cese de fabricación de la Transit, como por el desabastecimiento de piezas en motores y por un menor requerimiento para el mercado norteamericano. En concreto, el ERTE afecta a 1.400 personas diarias en la fabricación de vehículos (800 por el cese de la Transit y 600 por la falta de producción) y 900 personas en motores.
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