Piden 281 años de cárcel para un acusado de captar a 48 menores para grabar pornografía
Juicio en Alicante
El reo se hacía pasar a veces por una chica menor de edad que enviaba fotos y videos de tipo sexual para crear un clima de confianza con las víctimas y conseguir que niñas y niños de entre 10 y 15 años hicieran lo mismo
Audiencia Provincial de Alicante
La fiscalía pide 281 años y 3 meses de cárcel para un hombre acusado de captar a través de Internet a 38 niñas y 4 niños de todo el país de entre 10 y 15 años para crear producción propia de pornografía infantil y agredir sexualmente a alguna de las víctimas.
El juicio comienza mañana este martes y proseguirá hasta el jueves en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Alicante, según informa el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.
Fueron captados a través de Internet 38 niñas y 4 niños de todo el país de entre 10 y 15 años
Al hombre se le acusa de 34 delitos de exhibición de material pornográfico a menor, 31 de elaboración de material pornográfico utilizando a niños y niñas, cinco de embaucamiento en concurso con cinco delitos de agresión sexual, dos de inducción a la prostitución, otros dos de exhibicionismo y uno más de embaucamiento para obtener material pornográfico.
La acusación pública sostiene que el encausado actuó de forma continuada desde 2017 y que usaba teléfonos, ordenadores y otros dispositivos para participar de forma activa en foros o grupos de Whatsapp en los que hablaba con perfiles falsos.
Era frecuente que el acusado propusiera a las niñas encuentros personales, y llegó a mantener relaciones sexuales con algunas
En ocasiones, se hacía pasar por una chica menor de edad que enviaba fotos y videos de tipo sexual, con la intención de crear un clima de confianza con las víctimas y conseguir que éstas hicieran y le mandaran material pornográfico.
La fiscalía añade que era frecuente que el acusado propusiera a las niñas encuentros personales, lo que consiguió en ocasiones, y llegó a mantener relaciones sexuales con algunas de las víctimas, a las que ofrecía con frecuencia regalos, como recargas de saldo para sus teléfonos, dinero o ropa.