La violencia de género adolescente ha aumentado un 212% en la Comunidad Valenciana en el período entre 2018 y 2022 según el informe de la Fundación de Ayuda a Niños/as y Adolescentes en Riesgo (ANAR). Una cifra preocupante que supone una diferencia de 124,8 puntos porcentuales más que en el resto de España. Desde las administraciones se constata la realidad que muestran las cifras y se vislumbra en casos como el de los cinco menores detenidos por la violación de una niña de 15 años en Dolores, Alicante, conocido este jueves.
"Los menores están normalizando determinadas actitudes y hay un retroceso en la igualdad", ha destacado la vicepresidenta segunda y consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero, que este jueves ha acompañado a la Fundación ANAR en la presentación de los resultados del último informe realizado por la entidad sobre la evolución de la violencia contra las mujeres en la infancia y adolescencia.
Los menores están normalizando determinadas actitudes y hay un retroceso en la igualdad"
En la presentación, Diana Díaz, directora de las líneas de ayuda a menores ANAR, ha desglosado un enjambre de datos sobre la atención que la entidad presta a menores y adolescentes y que revela que el grueso de las consultas es, tanto en la Comunidad Valenciana como en el resto de España, sobre violencia de género. Son el 53,8% de los casos.
Díaz ha asegurado que tanto los casos como los testimonios recogidos "son graves" y ha señalado que, a pesar de las cifras, el 57% de las adolescentes no es consciente de la realidad que vive. "Los mitos del amor romántico o la justificación de los celos", ha explicado, se esconden detrás.
En su análisis también ha explicado Díaz que la edad a la que se comienza a ser víctimas es a los 15 años, una media de edad en la Comunidad Valenciana que supera a la española, cuya media se sitúa en los 16 años, edades "cada vez más tempranas y vulnerables".
El 57% de las adolescentes no es consciente de la realidad que vive
Por otra parte en el tiempo analizado por ANAR también ha crecido la incidencia de la tecnología en este tipo de violencia contra las mujeres y los y las menores. De hecho, las tecnologías están implicadas en un 83,2% de los casos de violencia de género adolescente, 3,5 puntos porcentuales más que la media de España. "La tecnología es una arma poderorísima para el agresor", ha señalado Díaz.
Asimismo, también perciben un aumento de las agresiones sexuales en grupo, las llamadas 'manadas'. En los últimos diez años estas han pasado de ser el 2,1% a representar el 10,5% de los casos.
El estudio presentado este martes ha sido elaborado por la Fundación ANAR a través de una subvención del Ministerio de Igualdad. La Fundación tiene sede en la Comunidad Valenciana.