La Guardia Civil ha liberado en dos municipios de la provincia Valencia más de 270 aves -la mayoría de ellas protegidas- que habían sido capturadas con artes ilegales, e investiga a dos hombres por delitos contra la flora y la fauna al usar artes no selectivas para la captura.
Según han informado este domingo fuentes de la Benemérita, gracias a diversas vigilancias en esta época de cría de fringílidas, se localizaron en primer lugar en el paraje conocido 'Camino Bayo' de Llíria (Valencia) varias artes ilegales de caza dispuestas para su uso.
La zona estaba cebada con abundante grano para atraer a las aves y había instaladas dos redes japonesas de ocho metros de longitud y dos metros de ancho, mientras que en un árbol vallado que tenía huevos de gallina y pienso de gato diseminado por el suelo había una apertura que facilitaba la entrada de las aves a las trampas.
Los agentes encontraron dos viveros de grandes dimensiones, donde había enjauladas más de 220 aves protegidas
En las inmediaciones, los agentes encontraron dos viveros de grandes dimensiones, donde había enjauladas más de 220 aves protegidas tanto por la legislación nacional como por convenios internacionales, que estaban en buen estado y, por tanto, fueron puestas en libertad.
En concreto, se liberaron 7 zorzales, 4 palomas turcas, 1 perdiz, 110 jilgueros, 38 pardillos comunes, 10 lúganos, 20 zorzales comunes, 1 estornino pinto y 30 verderones, y se intervinieron tres botes de pegamento y 500 varetas para impregnación de liga para su uso como método de captura no selectiva.
Los agentes han investigado a un hombre de 54 años por dos delitos contra la flora y fauna
Finalmente, los agentes han investigado a un hombre de 54 años por dos delitos contra la flora y fauna, por el uso de artes no selectivas de captura y por la captura de aves protegidas por convenios internacionales y legislación estatal.
Además, la Guardia Civil de Valencia ha localizado en el paraje "El Quint" de Riba-Roja del Túria otro campo agrícola cebado con abundante grano y rodeado de vegetación que lo ocultaba, donde detectaron a una persona parapetada que sujetaba una cuerda que activaba una trampa para capturar a las aves que se estaban alimentando.
También se localizó en Riba-Roja otro campo agrícola cebado con abundante grano
Tras identificar al hombre, los agentes hicieron una inspección más detallada de la zona y hallaron cuatro jaulas colgadas en ramas de un árbol, en cuyo interior había varias tres jilgueros y un híbrido de canario con jilguero.
En el centro del recinto encontraron otro jilguero utilizado como señuelo, que tenía atada una de sus patas a una madera anclada al suelo, y al inspeccionar las redes localizaron 2 jilgueros, 1 gorrión y 1 verdecillo.
Los agentes decomisaron las 5 aves utilizadas como reclamo (4 jilgueros y 1 híbrido de canario-jilguero), que fueron trasladadas al centro de recuperación La Granja del Saler para ser tratadas allí antes de poder ser puestas en libertad. El resto de aves silvestres capturadas estaban en buen estado y se procedió a liberarlas.
La investigación finalizó con una persona de 60 años investigada por un delito contra la flora y la fauna por el uso de artes no selectivas para la captura.
Las diligencias han sido entregadas en la Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.