La Policía Nacional ha detenido esta madrugada en Móstoles (Madrid) a uno de los diez fugitivos más buscados de España, que había sido condenado por delitos de robo con fuerza y que había herido a varios agentes en anteriores ocasiones para eludir su detención
Según una nota de la policía, Gregorio Navas Hernández era considerado uno de los “aluniceros” históricos (especializado en reventar escaparates de comercios) y uno de los pocos pendientes aún por detener. Contaba con más de 20 antecedentes por delitos de robo con fuerza, lesiones, delitos contra la seguridad vial, contra la seguridad del tráfico, asociación ilícita, falsificación documental, robo de vehículo y atentado contra agente de la autoridad.
Navas se encontraba en paradero desconocido y huido de la justicia desde que no regresó a la prisión de Valdemoro, donde cumplía condena, tras un permiso penitenciario.
La policía lo detectó inicialmente en una vivienda de Móstoles junto a su mujer y sus hijos, quienes colaboraban en su ocultación mediante medidas de contravigilancia.
En esa ocasión eludió su detención y más tarde la Guardia Civil lo localizó en Sonseca (Toledo) donde con su fuerte resistencia evitó su detención. El criminal intentó atropellar a los agentes con su vehículo, por lo que resultaron heridos.
Esto llevó a incluirlo en la lista de “Los diez fugitivos más buscados” de España en julio, y gracias a las informaciones facilitadas por los ciudadanos se pudo detectar de nuevo su presencia en el domicilio de Móstoles.
El fugitivo apenas salía de su vivienda, y siempre con la cara tapada con mascarillas quirúrgicas, gorros y gafas para dificultar su identificación.
Los agentes consiguieron su plena identificación el lunes, por lo que solicitaron la autorización judicial para entrar en el domicilio y lanzaron una operación que culminó en la detención durante la pasada madrugada.