La videoconsola más cara que se recuerda, tanto por el precio económico como por el coste personal. Poco se lo imaginaba el comprador, que el pasado 2 de octubre accedió a la adquisición del artilugio y acabó sufriendo una extorsión de más de 18.000 euros y amenazas de muerte. Todo ha acabado con dos personas detenidas por los Mossos d'Esquadra en Santa Coloma de Gramenet.
Esta pesadilla arrancó en una plataforma de compraventa de productos de segunda mano, según el relato de la policía de la Generalitat de Catalunya. El comprador de la videoconsola quedó con el vendedor en Badalona y después se trasladó a Sant Adrià de Besòs para ir a buscar su nuevo entretenimiento.
La videoconsola era robada
Pero en Sant Adrià de Besòs se llevó una sorpresa: el vendedor le dijo que la policía acababa de detener a su primo y que la videoconsola estaba requisada porque era robada. Ni corto ni perezoso, el vendedor fue más allá y le exigió al comprador el pago de 8.500 euros para pagar a un abogado porque, argumentó, que todos estaban involucrados en el delito. En caso de no querer pagar, le amenazó de muerte.
Y la persona que quería disfrutar de los videojuegos aceptó y pagó 8.500 euros. Pero las amenazas de muerte continuaron. La víctima, temerosa por su integridad, llegó a hacer tres pagos más al extorsionador: dos de 3.500 euros y otro de 3.000. Cuando la persona extorsionada denunció ante los Mossos d'Esquadra lo sucedido, le pedían 11.000 euros más.
La policía catalana arrancó una investigación desde la comisaría de Santa Coloma de Gramenet, que acabó el 22 de octubre con el arresto de dos hombres, de 39 y 38 años de edad, como presuntos autores de un delito de extorsión. Uno de ellos, que acompañaba al extorsionador, quedó en libertad después de declarar en sede policial. El principal acusado pasó a disposición judicial.