El Ayuntamiento de Barcelona restringirá a partir de este fin de semana los horarios de funcionamiento de las terrazas de la calle Tuset, en el barrio de Sant Gervasí-Galvany. La medida está desatando la indignación de los restauradores de la zona, que entienden que el gobierno del alcalde Jaume Collboni está actuando de una manera tremendamente opaca, y también que estas restricciones no mejorarán de ningún modo el descanso de los vecinos.
Tal y como ya publicó el BOE, las terrazas de este conocido eje del ocio nocturno barcelonés se verán obligadas a dejar de funcionar a las doce de la noche, en lugar de a la una de la madrugada, los viernes y los sábados. Los restauradores lamentan la pérdida de una de las franjas horarias más suculentas de su actividad, y subrayan que de este modo no verán reducidas las molestias nocturnas que padecen muchos vecinos, que el origen de estas molestias son otras actividades más tardías.
La medida
Los negocios tendrán que recoger sus mesas y sillas a las doce de la noche los viernes, los sábados y las vigilias de festivo
Fuentes del Gremi de Restauració de Barcelona subrayan que “esta medida se ha tramitado con nocturnidad y alevosía, de una forma opaca, extremando las precauciones para que no trascendiera a la opinión pública. A diferencia del resto de restricciones municipales, el expediente no se ha sometido a información pública. Ha imperado el secretismo”.
Las fuentes del Gremi abundan que este caso es similar al del Triángulo Golfo. “En un espacio de ocio nocturno que pivota alrededor de una o varias discotecas, las medidas del Ayuntamiento ponen el foco en las terrazas ¿qué cambio supondrá que no haya terrazas de doce a una los viernes y sábados en Tuset? Tal y como venimos denunciando desde hace unos meses, el acoso a la restauración y a las terrazas persiste”.