El pleno de la Diputación de Barcelona ha aprobado este jueves el presupuesto para 2023, que cuenta con 1.241,88 millones de euros -la cifra más elevada de su historia- con 1.087,4 millones más una partida adicional de 154 millones procedente del remanente de tesorería, lo que supone un aumento del 4,28% respecto al del presente ejercicio.
La presidenta de la corporación, Núria Marín, junto a la vicepresidenta segunda, Carmela Fortuny y el diputado de Recursos Humanos, Hacienda y Servicios Internos, Carles Ruiz, ha presentado las cuentas en rueda de prensa antes de recibir la luz verde del pleno con los votos favorables de PSC, Junts, En Comú Guanyem y Tot per Terrassa; y la abstención de ERC, Cs y PP.
Han votado a favor PSC, Junts, En Comú Guanyem y Tot per Terrassa; ERC, Cs y PP se han abstenido
El presupuesto, el último de este mandato, mantiene el equilibrio entre ingresos y gastos y no presentan déficit, un hecho que Marín, Ruiz y Fortuny han destacado teniendo en cuenta los "impedimentos" de los últimos años por la pandemia de la covid y la guerra de Ucrania, que ha generado una crisis energética y el aumento de los tipos de interés y de la inflación. Esto ha provocado una desaceleración de la actividad económica y una revisión a la baja de las estimaciones de crecimiento global. En ese sentido, se prevé un crecimiento de más de un 55% de la partida destinada a los suministros (+4,1 millones) a causa del aumento de los precios de la energía.
Para la socialista Núria Marín, alcaldesa de L'Hospitalet, este presupuesto es "una carta de navegación ambiciosa y realista" teniendo en cuenta el mandato, que ha definido como complejo y difícil, y confía en poder ejecutar las cuentas como está previsto para continuar manteniendo el apoyo de la corporación a los ayuntamientos.
Marín atribuye al diálogo el "éxito" del gobierno PSC-Junts
La presidenta de la Diputación de Barcelona, la socialista Núria Marín, ha defendido este jueves el diálogo como "una de las claves del éxito" del mandato de la corporación, con un gobierno de coalición con PSC y Junts. "No hay fórmulas mágicas para hacer las cosas bien, pero creo que podemos decir que hemos utilizado una que nos ha unido, que es el diálogo", entre el gobierno de la corporación y también con los grupos de la oposición, ha añadido la también alcaldesa de L'Hospitalet. "Conformamos un gobierno que probablemente no era el esperable, hemos sido noticia permanentemente, y creo que el éxito del gobierno ha sido que poco a poco se ha ido trabajando en todos los temas que nos unen, que son ayudar a los ayuntamientos", ha defendido. Por su parte, el diputado de Junts, Joan Carles García, ha explicado que estas cuentas "culminan toda una obra de gobierno", que tiene como objetivo resolver los problemas de los ayuntamientos, y ha calificado a la Diputación como una administración ejemplar.
Carles Ruiz (PSC), alcalde de Viladecans, ha destacado que el 83% del Presupuesto se destina a los ayuntamientos (más de 898 millones), lo que considera que refuerza a la Diputación como "una entidad de apoyo con la prestación de servicios y creación de redes", una característica que asegura que les hace diferentes a otras administraciones. Ha valorado la capacidad de gasto de la corporación, un "éxito que tiene que ver con la musculatura que han ejercido los municipios que a pesar de las circunstancias difíciles han podido poner en marcha sus proyectos".
Por su parte, Carmela Fortuny, de Junts, que es concejal de Sant Cugat, ha destacado que los recursos del marco presupuestario "se convertirán en más servicios para el territorio y para los vecinos y vecinas, además de dar oxígeno a los ayuntamientos".
La sede la Diputación de Barcelona, en la confluencia de la rambla Catalunya con la Diagonal
Los ingresos de la Diputación provienen de tres fuentes de recursos diferentes. Por una parte, 832,33 millones de euros (el 76,54% del total) corresponden a la cesión y participación en los tributos del Estado, como el IRPF, el IVA, impuestos especiales o la participación en tributos del estado. La segunda fuente es la de los ingresos no tributarios (213,72 millones, 19,65%), que incluyen los precios públicos, las subvenciones, los ingresos patrimoniales, las operaciones de activos financieros y otras actividades administrativas en régimen de derecho público. Y, finalmente, los ingresos tributarios (41,39 millones, 3,81%), entre los cuales se incluye el recargo del impuesto sobre actividades económicas (IAE) y las tasas.
El 95% de las transferencias de capital van destinadas en gobiernos locales (152,6 millones). Dentro de esta partida destaca la anualidad del Programa General de Inversiones y los proyectos Renovables 2030 y Resiliencia 2.0. También destaca las transferencias para el Campus de alimentación al recinto Torribera de la Universitat de Barcelona, en Santa Coloma de Gramenet (4,28 millones de euros) y la ampliación de Fira de Barcelona en l'Hospitalet (2,36 millones).
El apoyo a los ayuntamientos es el pilar básico. El 83% de las cuentas previstas (1.087, 4 millones) se destina a actuaciones dirigidas –directos o indirectos- a los municipios. La prioridad es mantener el compromiso para atender los sectores más vulnerables de la sociedad y a la vez reactivar la economía municipal. El plan Xarxa de Governs Locals, con 274,47 millones, continuará siendo una de las principales vías, que se materializa con el Catálogo de Servicios (132,1 millones), el Programa General de Inversiones (61,1 millones) y los programas sectoriales o específicos (81,2 millones).
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En el capítulo de inversiones destacan las destinadas al mantenimiento de la red local de carreteras con un importe de 44,76 millones de euros, entre los cuales se incluyen el plan seguridad vial con 12,61 millones, el proyecto transformador vinculado al programa Smart Road con 5 millones para consolidar la inversión en proyectos de instalaciones de infraestructuras de comunicaciones en la red local de carreteras y cerca de 1 millón para el programa paliativo de seguridad vial de itinerarios de alto riesgo de accidentalidad IARA.
El proyecto de presupuesto también prevé destinar 4,5 millones de euros al proyecto Via Blava Anoia Fase I, cofinanciado a través de los fondos europeos Next Generation; así como inversiones relacionadas con las Accions Pla Clima (700.000 euros) y el mantenimiento de los edificios y recintos corporativos.
Asimismo, el presupuesto incluye 4,23 millones en inversiones en la Red de Bibliotecas Municipales, 2,87 millones para la cartografía topográfica digital municipal y 1,25 millones repartidos en varias actuaciones en el patrimonio arquitectónico, como las actuaciones en el arco romano del Pont del Diable, en Martorell, el castillo de Cubelles, el castillo de Talamanca y la adecuación de la muralla del Turó del Montgròs.
La partida adicional de 154,4 millones, que se sumarán a los 1.087,45 millones, se prevé que reciba luz verde a principios de año. Eso es posible, nuevamente, a la supresión de las reglas fiscales que permiten utilizar el remanente líquido de tesorería.