Los miembros del Partido Liberal de Canadá eligieron ayer al sucesor de Justin Trudeau al frente de la formación y como primer ministro provisional. Trudeau anunció su plan de retirarse hace prácticamente nueve semanas, y tras permanecer nueve años en el poder.
Mark Carney, exdirector del Banco Central, se impuso a otras tres candidaturas, la de la ex vice primera ministra Chrystia Freeland; la expresidenta del Parlamento, Karina Gould, y el hombre de negocios de Montreal y diputado Frank Baylis. Carney ganó con el 86% de los votos.
Ya antes del anuncio del ganador, miembros del Partido Liberal estaban distribuyendo pancartas de Mark Carney. Era el favorito, con la mayor cantidad de apoyos de los miembros del partido y la mayor cantidad de dinero recaudado de los cuatro candidatos liberales.
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De 59 años, Mark Carney demostró saber navegar entre crisis cuando fue director del Banco de Canadá y cuando en el 2013 se convirtió en el primer no ciudadano en dirigir el Banco de Inglaterra desde su fundación, en 1694. Su nombramiento recibió elogios bipartidistas en el Reino Unido después de que Canadá se recuperara de la crisis financiera del 2008 más rápido que muchos otros países.
El próximo primer ministro tendrá que negociar con el presidente estadounidense, Donald Trump, que amenaza con imponer aranceles adicionales a Canadá, y pronto podría enfrentarse a la oposición conservadora en unas elecciones generales. Las encuestas indican que ni los liberales ni los conservadores podrían formar un gobierno mayoritario. En una protesta frente al edificio del Parlamento de Canadá en Ottawa el domingo, docenas de canadienses levantaron carteles contra Donald Trump sin ninguna referencia a la política interna.
Hubo una serie de factores que llevaron al colapso político de Justin Trudeau, desde pérdidas inesperadas en elecciones parciales hasta luchas internas en el partido y la dolorosa renuncia de uno de sus aliados más antiguos, según recordaba ayer la cadena CBC, además de la carestía y el problema de la vivienda. Trudeau desarrolló un estilo muy personal y de cuidada imagen, en la que destacaba la elección del color y el diseño de sus calcetines en comparecencias públicas.