La Corte Penal Internacional (CPI) ha dictado este jueves órdenes de detención contra el primer ministro israelí, Beniamin Nentayahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, como máximos responsables de la comisión de “crímenes de guerra y lesa humanidad” en la franja de Gaza al menos desde el 8 de octubre del año pasado.
Los jueces también aprobaron la orden de arresto de Mohammed Deif, un alto cargo de Hamas considerado jefe de su ala militar, aunque Israel ya lo declaró muerto en un ataque israelí lanzado el pasado junio contra la franja, un fallecimiento que nunca fue confirmado por el grupo islamista.
El país hebreo no reconoce la autoridad de la CPI, pero los 124 países que sí lo hacen estarían obligados a detener a Netanyahu si este viajara a sus respectivos territorios.
Uno de los países, sin embargo, que también rechaza la orden del CPI es EE.UU. Estados Unidos. “Estados Unidos rechaza fundamentalmente la decisión de la Corte de emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios israelíes”, dijo a EFE un portavoz de la Casa Blanca, quien explicó que Washington está coordinándose con sus aliados, incluido Israel, sobre los “próximos pasos” a tomar.
El CPI rechaza las impugnaciones
Con esto, la Sala de Cuestiones Preliminares rechazó por unanimidad las impugnaciones presentadas en septiembre por Israel, que negaba la jurisdicción de la CPI sobre la situación en el Estado de Palestina en general, y sobre los ciudadanos israelíes en particular. El Gobierno israelí también había exigido a los jueces que detuvieran “cualquier procedimiento relacionado con la situación".
“No es necesario que Israel acepte la jurisdicción de la Corte, ya que esta puede ejercer su jurisdicción sobre la base de la jurisdicción territorial de Palestina, como se determinó anteriormente”, advirtió la Sala. Consideró además que los Estados “no pueden impugnar la jurisdicción de la Corte antes de la emisión de una orden de arresto, por lo que la impugnación de Israel es prematura”, agregó.
No es necesario que Israel acepte la jurisdicción de la Corte
La medida se produce después de que el fiscal general de este tribunal, Karim Khan, solicitara el 20 de mayo órdenes de detención contra los dos altos cargos israelíes y la cúpula del grupo terrorista (el fiscal también incluyó a Isramail Haniyeh y Yahya Sinuar pero ambos han sido asesinados por el ejército israelí y confirmado por Hamas). Entonces Khan declaró que había que “demostrar que todas las vidas humanas valen lo mismo”.
Netanyahu calificó de “antisemita” la decisión de la CPI. al considerarse víctima de un nuevo “juicio Dreyfus”. “La decisión antisemita de la Corte Penal Internacional es comparable al juicio de hoy contra Dreyfus, que terminará de la misma manera”, según un comunicado de la oficina de Netanyahu. Condenado por espionaje, degradado y enviado a una colonia penal a finales del siglo XIX en Francia, el capitán judío Alfred Dreyfus fue exonerado y rehabilitado unos años más tarde.
La decisión antisemita de la CPI es comparable al juicio contra Dreyfus
El presidente israelí, Isaac Herzoc, tildó las órdenes de “una decisión absurda”. El ex primer ministro israelí Naftali Bennett tachó de “vergüenza” la decisión de la CPI, mientras que el principal líder de la oposición israelí, Yair Lapid, también denunció la medida del tribunal con sede en La Haya, calificándola de “recompensa al terrorismo”.
La administración de Joe Biden se opone a que la CPI actúe contra los líderes de Israel ya que cree que no tiene jurisdicción sobre el caso. Varios miembros del Congreso estadounidense advirtieron durante la primavera que, si La Haya movía ficha en a favor de las órdenes, aprobarían sanciones contra miembros del tribunal.