Ucrania ataca con drones a refinerías de petróleo en territorio ruso
Guerra en Europa
El Estado Mayor ucraniano ha confirmado el ataque de más de un centenar de drones a infraestructuras de refinería de petróleo
Miembros del Ministerio de Emergencias ruso extinguen un incendio en un tanque de petróleo después de un presunto ataque con drones en la ciudad de Azov, Rusia, el 18 de junio de 2024
Ucrania ha reivindicado un ataque de la noche del jueves contra varias refinerías de petróleo del suroeste de Rusia, según ha informado el Estado Mayor ucraniano en un comunicado de prensa. Por su parte, Moscú ha afirmado haber neutralizado 114 aviones no tripulados ucranianos y ha declarado la muerte de una persona.
Entre los objetivos militares, fuentes ucranianas han reconocido el ataque en las ciudades de Afipski, Ilski, Krasnodar y Astracán, además de una “zona de almacenamiento y preparación” de drones explosivos Shahed 136 y Geranium 2, modelos utilizados por Moscú en ataques a infraestructuras energéticas ucranianas.
También durante la pasada madrugada, aparatos no tripulados ucranianos atacaron radares y centros de inteligencia radioelectrónica rusos en la región fronteriza de Briansk y en la ocupada península de Crimea.
Algunos de estos lugares se encuentran a cientos de kilómetros de los puntos más cercanos de los territorios ucranianos que siguen bajo control de Kyiv. La noticia sorprende, puesto que Ucrania no suele reivindicar oficialmente ataques dentro de territorio ruso.
Los ataques con drones buscan afectar la capacidad financiera rusa
Ucrania está intensificando sus ataques a refinerías y objetivos estratégicos y militares situados en la Federación Rusa para llevar la guerra a territorio enemigo y debilitar su logística y sus suministros en la retaguardia.
Los ataques con drones tendrían un impacto en la capacidad de comercialización de petróleo y buscan afectar la capacidad financiera rusa. Según publicaba el Financial Times anteriormente, Washington pidió en marzo a Kyiv que detenga sus ataques con drones sobre refinerías para evitar un aumento del precio del petróleo, y una subida de la gasolina en Estados Unidos, lo cual podría afectar a la campaña electoral del presidente Biden.