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Trump y Haley se baten a duelo en Nuevo Hampshire

La carrera hacia la Casa Blanca

Las primarias de este martes, segunda cita del año electoral, definirán las opciones de la exgobernadora de Carolina del Sur de seguir en pie en la carrera republicana

Nikki Haley fue embajadora de EE.UU. ante la ONU durante parte de la administración de Donald Trump.

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La retirada temprana de Ron DeSantis de la carrera electoral ha convertido a las primarias republicanas en un duelo directo entre Donald Trump y Nikki Haley. O, más bien, en un plebiscito que pondrá a prueba los apoyos del primer expresidente imputado con cargos penales en la historia de EE.UU. (hasta 91 delitos en cuatro procesos judiciales distintos). Es el escenario que ambos llevaban meses esperando: Haley se erige, ahora sí, en la única alternativa al dominio absoluto del polémico magnate sobre el partido, y Trump, con el respaldo de casi todos los caídos en batalla, centra sus ataques –en forma de burlas, menosprecios y acusaciones de "traición"– en un único objetivo.

"¿Pueden oír ese ruido?", preguntó la exgobernadora de Carolina del Sur en su mayor acto de campaña hasta la fecha, ante apenas un millar de personas, el domingo en Exeter (Nuevo Hampshire). "Es el sonido de una carrera a dos". Sin embargo, su victoria se paga muy cara en las casas de apuestas: desde el 2016, nadie en el Partido Republicano ha plantado cara al caballo ganador. Y, aunque perdió en las urnas frente a Joe Biden en 2020, muchos siguen creyendo sin pruebas que aquello fue un fraude electoral.

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El primer asalto, y quizás el último, no se hará esperar: este martes, Trump y Haley se retarán a duelo en Nuevo Hampshire, segunda cita de primarias de la contienda republicana, después de la arrolladora victoria del magnate –con un 51% de los votos y a 30 puntos de su contrincante– en los caucus de Iowa. Desde esa fecha, el lunes pasado, tres candidatos han abandonado la carrera electoral por falta de fondos y apoyos: el exgobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, que ha pedido el voto a Haley, así como el empresario Vivek Ramaswamy y el gobernador de Florida, DeSantis, que respaldan a Trump.

En Nuevo Hampshire, tan solo se repartirán 22 del total de 2.429 delegados que elegirán en julio, en Milwawkee (Wisconsin), al aspirante republicano a la Casa Blanca. Pero el resultado podría ser determinante: una victoria contundente de Trump dejaría tocada a Haley y sin apenas opciones de seguir en pie en la batalla por la nominación. En este estado, menos religioso, rural, conservador y trumpista que Iowa, la exembajadora de EE.UU. ante la ONU cuenta con mejores opciones, aunque sigue muy por detrás del expresidente: la última encuesta le da el 34% de la intención de voto, frente al 52% de Trump, y se espera que la mayoría de los que apoyaban a DeSantis (8%) terminen votando al magnate.

Haley busca captar el voto anti-Trump entre independientes y moderados

En las primarias de Nuevo Hampshire, pueden votar los ciudadanos registrados como independientes, que son el 40%. Mientras la base republicana está claramente alineada con Trump, Haley confía en el apoyo de estos votantes, así como de los republicanos más moderados, para dar la sorpresa. Con una campaña intensa, se ha ganado el apoyo del gobernador, el popular Chris Sununu, pero sus opciones siguen siendo muy limitadas.

Ante una votación que podría ser decisiva, los dos candidatos han intensificado sus ataques durante la última semana. Haley, que el sábado cumplió 52 años, se presenta como portadora del "cambio generacional" en un partido dominado por el "caos" y las "distracciones" de Trump, de 77 años. “La mayoría de los estadounidenses no quiere tener que elegir entre dos octogenarios presentándose a la Casa Blanca”, dijo en un discurso en Bretton Woods (Nuevo Hampshire), asegurando que la lucidez del expresidente y de Joe Biden están “en declive”.

Respondía a otro discurso viral, en el que Trump confundió repetidamente a Haley con Nancy Pelosi, quien era presidenta de la Cámara de Representantes durante el asalto al Capitolio. “Trump sigue diciendo que yo impedí la seguridad el 6 de enero, ¡pero ni siquiera estaba cerca del Capitolio!", aseguró: “No podemos tener a una persona a quien cuestionemos si realmente es apta para las presiones de la presidencia".

Trump lanza burlas racistas contra Haley y cuestiona su origen estadounidense

Por su parte, Trump ya se ve vencedor y ha sacado a pasear su manual de estilo: al igual que hizo con Barack Obama, ha cuestionado el lugar de nacimiento de Haley, hija de inmigrantes indios, pero nacida en Bamberg (Carolina del Sur). Y le ha lanzado una serie de burlas racistas, riéndose de su primer nombre (Nimarata), y apodándola “Nimbra” en una publicación en su red social, Truth Social. “Haley carece de madera presidencial”, dijo el viernes, en un discurso de campaña en Concord, la capital de Nuevo Hampshire, “por lo que probablemente no la elegiré como mi vicepresidenta”.

Cuando cierren las urnas esta noche, alrededor de las 20 horas (las dos de la madrugada en España), la suerte estará echada. Si Haley logra un sólido segundo puesto, o el inesperado triunfo frente a Trump, mantendrá vivas sus opciones en las siguientes citas del calendario de primarias: los caucus de Nevada, donde se prevé que el magnate arrase, y las primarias de Carolina del Sur, estado del que fue gobernadora. Sin embargo, un decepcionante resultado podría suponer el fin de su campaña electoral y allanaría el camino de Trump hacia la nominación republicana.

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Javier de la Sotilla
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