EE.UU. derriba 21 drones y misiles en el mayor ataque hutí en el mar Rojo
Crisis en Oriente Medio
La inestabilidad en la zona ha triplicado el coste del transporte marítimo de mercancías
La economía internacional tiene un problema en el mar Rojo que lejos de solventarse, va a más. Estados Unidos ha asegurado esta madrugada que ha derribado 21 drones y tres misiles en un “complejo ataque” de los rebeldes hutíes de Yemen contra las embarcaciones comerciales que pasan frente a sus costas. Lo hizo con la colaboración británica.
Es el ataque número 26 y el más importante desde que los insurgentes iniciaran su ofensiva contra las embarcaciones vinculadas a Israel en la ruta comercial clave del mar Rojo desde que secuestraran un barco mercante, el Galaxy Leader, que iba de Turquía a India y en última instancia era propiedad de una empresa israelí, aunque operado por una japonesa. Los hutíes indican que lo harán contra todo buque en dirección a Israel o relacionado con Israel hasta que acabe la guerra de Gaza.
“Los hutíes respaldados por Irán lanzaron un ataque complejo con vehículos aéreos no tripulados de ataque unidireccionales diseñados por Irán”, explicó esta madrugada el comando central estadounidense. No hay daños ni heridos, según relata su comunicado.
Se trataría de misiles de crucero antibuque y un misil balístico antibuque lanzados desde áreas de Yemen controladas por los hutíes. Fueron respondidos por aviones de combate del portaaviones estadounidense Dwight D. Eisenhower, tres destructores también de Estados Unidos y un buque de guerra británico, el HMS Diamond.
El portavoz militar de los hutíes, Yahya Sarea, confirmó su ofensiva contra “un barco estadounidense”, en respuesta al ataque por parte de Estados Unidos que acabó con la vida de diez rebeldes en el mar Rojo el pasado 31 de diciembre.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas votará hoy un proyecto de resolución presentado por Estados Unidos que condena los ataques a la marina mercante en el mar Rojo –por donde circula cerca del 15% del comercio mundial– y exige su fin inmediato y la liberación del Galaxy Leader y su tripulación. Hasta el momento los ataques ya han hecho que buena parte de las navieras eviten pasar por la zona y ha triplicado los costes del transporte marítimo de mercancías.
El Ministro de Defensa británico anunció el martes, mientras, que otra fragata, la HMS Richmond, se dirigía al mar Rojo para contrarrestar los “ataques” hutíes. Y el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, en Bahréin, lanza que el apoyo iraní a los hutíes “debe cesar”.
Como publicó ayer este diario, Estados Unidos insiste a España, además, para que se incorpore a la misión militar contra los hutíes en el mar Rojo, tema que trataron los máximos de los ejércitos estadounidense y español en una llamada.
Este nuevo incidente se produce en medio de la gira del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, a Oriente Medio con el fin de buscar apoyos para evitar la expansión de la guerra en la franja de Gaza a la región.