Gran parte de los argentinos admira la estabilidad política y económica de Uruguay, país vecino con el que, no obstante, también existe una rivalidad más bien caricaturesca que se expresa sobre todo en cuestiones futbolísticas. Y políticas, especialmente cuando ambas naciones están dirigidas por gobiernos de distinto signo, como es el caso.
La última polémica entre ambas naciones ha sido protagonizada por el ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, que aspira a ser el candidato unitario del peronismo en las elecciones presidenciales de octubre próximo.
Uruguay es un hermano menor del Mercosur. Brasil y Argentina tienen la responsabilidad de cuidarlo como los hermanos mayores que son”
En una rueda de prensa en la Casa Rosada junto a su homólogo brasileño, en las horas previas a la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que ayer tuvo lugar en Buenos Aires, Massa fue preguntado por el papel cada vez más independiente de Uruguay en el Mercosur. Al ministro argentino no se le ocurrió otra respuesta que despreciar a su vecino. “Uruguay es un hermano menor del Mercosur. Brasil y Argentina tienen la responsabilidad de cuidarlo como los hermanos mayores que son”, declaró el ministro.
Harto de la inestabilidad política de Argentina –y también de Brasil durante el gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro-, Uruguay decidió tras la llegada al poder del presidente liberal Luis Lacalle Pou desmarcarse del Mercosur y empezar a mantener negociaciones comerciales con terceros países, algo expresamente prohibido por el bloque sudamericano formado, además por Paraguay y Venezuela, que se encuentra temporalmente suspendida. El gobierno uruguayo negocia ya un tratado de libre comercio con China, lo que solivianta especialmente a la Casa Rosada.
Como era previsible, las declaraciones de Massa fueron trasladadas a Lacalle Pou en la rueda de prensa que el martes celebró en Buenos Aires. El mandatario uruguayo no quiso polemizar con el ministro argentino y, tras sonreír, se limitó a responder: “Parece Disneylandia”.
La fantasía de Disney en la que parece vivir Massa y buena parte de los líderes peronistas fue dejada en evidencia por otros políticos uruguayos, como el senador del gobernante Partido Nacional, Sebastián Da Silva, que tuiteó: “Gracias, Massa. Pero no creo que ningún uruguayo quiera ser cuidado con un ministro de Economía que tiene un dólar cotizando a 350 pesos”. Da Silva ponía el dedo en la llaga remarcando la desbordante depreciación del peso argentino, que tiene a los habitantes de la otra orilla del río de la Plata luchando cada día contra una inflación que cerró el 2022 en el 94,8%.
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