Una instalación artística rodea de cristales rotos a la "Niña sin miedo" de Wall Street por el 8M
DÍA de la mujer
Simbolizan todos los "techos de cristal" que las mujeres están rompiendo en el sector financiero
La estatua de la "Niña sin miedo", que está instalada frente a Wall Street, apareció rodeada este lunes de grandes trozos de vidrio para celebrar el Día Internacional de la Mujer, que simbolizan todos los "techos de cristal" que ellas están rompiendo en el sector corporativo.
Según publicó en las redes sociales State Street Global Advisors, que organiza las campañas de márketing en torno a esta escultura, la instalación artística "representa los muchos techos de cristal que las mujeres han roto tanto dentro como fuera de las salas de juntas".
El director ejecutivo y presidente de State Street, Cyrus Taraporevala, explicó en una carta que esta obra también es "un símbolo de los nuevos territorios en los que se está adentrando la mujer cada día", a la vez que apuntó que "1.486 compañías que se habían identificado previamente tenían consejos directivos exclusivamente masculinos" han añadido ahora al menos una directiva.
"Los cristales rotos de hoy son los peldaños del mañana", apunta la placa situada junto a los pedazos de vidrio.
La ya popular estatua, obra de la escultora uruguayo-estadounidense Kristen Visbal, se instaló por primera vez el 7 de marzo de 2017 con motivo del Día Internacional de la Mujer delante del famoso toro de Wall Street, a quien se enfrentaba con rostro desafiante.
"Conozca el poder de las mujeres en el liderato. Ella marca una diferencia", decía entonces el cartel que se colocó a su lado.
La pieza, que trataba de alertar sobre la brecha de género en el mundo de los negocios, se instaló de madrugada y con carácter temporal, pero fue tan bien recibida que permanecerá en las calles de Nueva York, aunque ya no se encuentra delante del toro de Wall Street.
Los cristales rotos de hoy son los peldaños del mañana"
El artista responsable del toro, Arturo Di Modica, arremetió entonces contra el hecho de que se hubiera colocado a la "Niña sin miedo" frente a su escultura, y señaló que era un "insulto" a su trabajo y que su obra estaba hecha "para todo el pueblo estadounidense".
Ahora, la "Niña sin miedo" mira desafiante al edifico de la Bolsa de Nueva York.