Trudeau expulsa de su partido a las dos exministras que le acusan de interferencia política
Escándalo en Canadá
La divulgación de una conversación grabada en secreto por una de las diputadas provoca la ira del Partido Liberal
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció este martes la expulsión del gobernante Partido Liberal de Canadá de las dos diputadas y exministras que en las últimas semanas han denunciado un posible caso de interferencia política.
La expulsión de Jody Wilson-Raybould, exministra de Justicia y ex fiscal general, y Jane Philpott, exministra del Tesoro, se produce después de semanas de crisis en el Gobierno canadiense y el Partido Liberal por las denuncias efectuadas por las ahora diputadas.
Wilson-Raybould dimitió como ministra de Trudeau el pasado 12 de febrero. Días después denunció ante el comité de Justicia del Parlamento que durante meses fue objeto de presiones por parte de Trudeau y sus asesores para favorecer a la mayor constructora del país, SNC-Lavalin. Un mes después, la entonces ministra del Tesoro, Jane Philpott, dimitió en solidaridad con Wilson-Raybould y por haber perdido la confianza en el Gobierno de Trudeau.
Grabación secreta, el detonante
A pesar de sus dimisiones del Gobierno, las dos manifestaron en repetidas ocasiones, incluido ayer mismo, su voluntad de permanecer en el Partido Liberal.
Pero la divulgación el pasado viernes de una conversación que Wilson-Raybould grabó en secreto con el poderoso secretario del Consejo Privado Real de Canadá, Michael Wernick, provocó la ira del resto del grupo parlamentario liberal. En los dos últimos días, ministros y diputados liberales criticaron con dureza que Wilson-Raybould grabase y posteriormente divulgase, sin informar a Wernick, su conversación.
Trudeau se refirió precisamente a la grabación secreta al anunciar la expulsión de Wilson-Raybould y Philpott del Partido Liberal.
”La confianza que previamente existía entre estos dos individuos y nuestro equipo se ha roto, ya sea por la grabación de conversaciones sin consentimiento o por expresar de forma repetida la falta de confianza en nuestro Gobierno o en mí, personalmente, como líder”, declaró Trudeau.
Wilson-Raybould y Philpott respondieron en medios sociales a la noticia de su expulsión.
La exministra de Justicia dijo en Twitter que sus pensamientos están dirigidos a su familia, amigos y “todos los canadienses que creían en una nueva forma de hacer política. Me tomaré algún tiempo para reflexionar y hablar con mis seguidores sobre qué haré”.
“Puedo decir que mantuve mi cabeza alta y que me puedo mirar en el espejo sabiendo que hice lo que era necesario hacer sobre la base de principios y valores que siempre deben trascender al partido. No me arrepiento”, añadió Wilson-Raybould.
Por su parte, Philpott dijo en Facebook que ha sido expulsada “sin la oportunidad de hablar” ante el grupo parlamentario liberal y no por “falta de lealtad”. “Por el contrario, recomendé que el Gobierno reconociese lo sucedido para pasar página. Esto fue una expresión de lealtad, no de deslealtad”, dijo.
“Lamento que la relación se haya roto tanto. Solo tengo buenos deseos para mis antiguos colegas liberales y a todos aquellos que se comprometen al servicio público”, concluyó la exministra del Tesoro.
Philpott también señaló que mantendrá el escaño hasta que se celebren nuevas elecciones, lo que está previsto en octubre de este año.
El escándalo de la supuesta interferencia política para favorecer a SNC-Lavalin ha perjudicado a Trudeau y los liberales en las encuestas y ahora aparecen en segundo lugar de intención de voto por detrás del opositor Partido Conservador.