Los asesores de Trump amigos del Kremlin
El ‘Rusiagate’
Antes y después de alcanzar la presidencia, el republicano se rodeó de consejeros bien vistos en Rusia
Paula Manafort
Trump era un promotor inmobiliario que a finales de los años noventa debía 4.000 millones de dólares a más de 70 bancos y que en el 2004 se declaró en quiebra. Fue entonces, habiendo quebrado seis veces y perdido todo acceso al crédito en EE.UU., cuando los oligarcas rusos acudieron en su ayuda. Donald Trump jr. confesó en el 2008 que “los rusos constituyen una parte abrumadora de nuestros activos de todo tipo. Nos llega mucho dinero de Rusia”. El Deutsche Bank parece que ayudó a mover el dinero que la mafia rusa y centroasiática vinculada al Kremlin utilizó para comprar activos inmobiliarios de Trump en EE.UU. y promover la construcción de varios proyectos, como el complejo Trump SoHo en Nueva York. Trump mantiene oculta su declaración de la renta –es el primer presidente que lo hace– para no mostrar, seguramente, su dependencia del capital ruso. El FBI sospecha que estos negocios mantienen a Trump como rehén del Kremlin.
PAUL MANAFORT
Jefe de la campaña electoral
Ayudó a que un político pro ruso ganara la presidencia de Ucrania. Entró en la campaña de Trump en marzo del 2016. Implantó las tácticas de la propaganda política rusa: desinformación y difamación contra Hillary Clinton. Convenció al candidato Trump para que pidiera a Moscú que la espiara. Dimitió en agosto del 2016 al saberse que había cometido fraude fiscal y bancario al no revelar cobros de la oligarquía rusa. Se ha declarado culpable y espera sentencia.
REX TILLERSON
Secretario de Estado
En 2013, siendo ejecutivo de la petrolera ExxonMobil, Putin le impuso la Orden de la Amistad en agradecimiento a sus negocios en el sector de la energía rusa. En el departamento de Estado ordenó una purga masiva que disminuyó la capacidad diplomática de EE.UU., medida que benefició a Rusia. Dimitió el pasado marzo.
JEFF SESSIONS
Fiscal general
Fue uno de los primeros senadores en apoyar al candidato Trump. Durante la campaña se reunió varias veces con Serguéi Kislyak, embajador ruso en Washington y mintió sobre ello cuando fue interrogado al respecto en el Senado. Como fiscal general se apartó de la investigación sobre el Rusiagate. Dimitió el pasado noviembre.
WILBUR ROSS
Secretario de Comercio
Antes de entrar en la administración Trump, fue vicepresidente del Banco de Chipre, el preferido por los oligarcas rusos para lavar dinero. Es copropietario de una naviera que transporta gas natural ruso para la empresa rusa Sibur, propiedad de un yerno y de un amigo íntimo de Putin. Sigue en el cargo.
JARED KUSHNER
Asesor del presidente
Cadre, una de sus sociedades, está participada por un empresario ruso vinculado al Kremlin. Ocultó este y otros negocios con socios rusos cuando fue interrogado para obtener su credencial de seguridad en la Casa Blanca. Durante la campaña se reunió con enviados del Kremlin que le dieron información perjudicial sobre Hillary Clinton.
MICHAEL FLYNN
Consejero de Seguridad Nacional
Flynn conoció a Putin siendo comentarista de RT, la televisión del Kremlin. Lideró un proyecto para construir centrales nucleares en Oriente Medio con capital ruso. Durante la campaña, hizo de enlace entre Trump y el Kremlin y ayudó a difundir noticias falsas. Mintió sobre todo ello al FBI. Dimitió en febrero del 2017.
CARTER PAGE
Asesor de política exterior
Trabajó a favor de compañías rusas de energía y fue accionista de Gazprom. Antes de la convención republicana, se entrevistó en el Kremlin con altos cargos del Gobierno y convenció a Trump para que, al aceptar la nominación, no criticara la invasión rusa de Ucrania. Dimitió durante la campaña, al revelarse sus lazos con Moscú.