Mario Biondo murió asesinado. Hasta ahora, esta aseveración era solo la fe de una familia. Sin embargo, ya hay dos verdades oficiales: la española, según la cuál el operador de cámara se suicidó, y la italiana, que niega tal versión y se inclina por la del homicidio doloso. Así ha podido confirmarlo La Vanguardia mediante acceso al auto judicial del juez instructor.
Durante nueve años, Santina D’Alessandro y Pippo Biondo, padres de Mario, han empeñado sus vidas en tratar de esclarecer que ocurrió la noche del 30 de mayo de 2013 en el domicilio que su hijo compartía con Raquel Sánchez Silva. Por fin se apuntan una victoria real y tangible: Nicola Aiello, juez instructor en el Tribunal de Primera Instancia de Palermo y al frente de la investigación, ha cerrado el caso dictaminando que murió a manos de terceros.
Los Biondo ganan la guerra
Nicola Aiello, juez instructor en el Tribunal de Primera Instancia de Palermo y al frente de la investigación, ha cerrado el caso dictaminando que murió a manos de terceros
Si la fiscalía de Palermo ha sostenido en los últimos tiempos que Mario se suicidó, tras examinar toda la información recabada durante nueve años, el instructor descarta tal posibilidad y señala un claro caso de homicidio. En efecto: desde 2013, la familia Biondo ha reunido una ingente cantidad de información firmada por criminólogos y peritos profesionales de primer nivel –dos de ellos, expertos españoles– que han coincidido en la misma explicación: a Mario lo mataron.
También el examen forense
El instructor italiano critica la ausencia de actividad investigativa y el archivo apresurado de las diligencias llevadas a término en España
El instructor italiano critica la ausencia de actividad investigativa y el archivo apresurado de las diligencias llevadas a término en España en orden a esclarecer las circunstancias de la muerte de Mario: “En el momento del hallazgo del cadáver, en la inmediatez de los hechos, deberían haberse realizado actividades de investigación (interceptaciones ambientales y telefónicas, adquisiciones de registros telefónicos) que de haberse dispuesto con prontitud en el momento inmediatamente posterior al descubrimiento del cadáver, podrían haber permitido la obtención de elementos de extrema relevancia investigadora (…) pero no se llevaron a cabo y, dado el tiempo transcurrido, no pudieron ser realizadas por las autoridades judiciales italianas”.
Alguien trató de empañar su memoria
Se descarta el juego autoerótico y que Mario hubiese bebido y consumido drogas aquella noche, tal como se quiso hacer creer en España
Este punto es una bofetada en la cara a la Policía española. El juez detalla todo lo que la instrucción italiana trató de reconstruir desde noviembre de 2013 mediante una comisión rogatoria internacional, desde registros telefónicos y geolocalización de las personas próximas a Mario, comprobación de coartadas, testificales que no se practicaron, datos de conexión a internet, etc. “La causa de la muerte, según los investigadores españoles, fue asfixia por sofocación, presumiblemente de carácter suicida”, recoge el juez Aiello en su auto para desmontar tal conclusión con evidencias incontestables. Descarta el juego autoerótico y que Mario hubiese bebido y consumido drogas aquella noche, tal como se quiso hacer creer en España.
“El examen toxicológico (que, como se verá más adelante, fue desmentido por actos de investigación posteriores) reveló la presencia de alcohol y cocaína en la sangre de Mario Biondo. Estos exámenes, sin embargo, fueron contradichos por los exámenes posteriores de la autopsia que revelaron que no se tomaron muestras de orina del cadáver. Por tanto, se considera excluido que Biondo hubiera consumido alcohol y medicamentos”. Sale malparada la Policía pero también el médico forense. Incluso el primer forense italiano, el doctor Paolo Procaccianti, cuyas conclusiones no resultan fiables. Es más, en la tercera y última autopsia sobre el cuerpo de Mario, el análisis de su cabello demostró que no había consumido alcohol ni drogas.
Afirma que ella se mostró hostil en el interrogatorio
En su auto, el juez se refiere expresamente a las contradicciones y reticencias manifestadas por su viuda y otros testigos
En su auto, el juez se refiere expresamente a las contradicciones y reticencias manifestadas por su viuda y otros testigos respecto a aquella noche fatídica, los días anteriores y “sobre los conflictos entre los cónyuges”. Desde que en junio de 2014 dos fiscales italianos viajaron a España para tomar declaración a una serie de personas próximas a Mario, “se percibió que la viuda y sus familiares se mostraron abiertamente hostiles durante sus audiencias”, señala el juez Aiello. ”Las innumerables contradicciones contenidas en las declaraciones de la viuda de Biondo deberían, a juicio de este tribunal, haber inducido a los investigadores españoles a establecer un servicio inmediato de interceptación telefónica y ambiental”.
El final del auto resume lo que la familia de Mario viene sosteniendo desde hace años: “Los elementos extraídos del expediente del fiscal, en opinión de este juez, refutan la tesis del suicidio y sugieren que Mario Biondo fue asesinado por una mano desconocida y posteriormente colocada en una posición para simular un suicidio”.