El 29 de abril de 2011, en Londres, era Kate Middleton quien caminó hacia el altar de la catedral de San Pablo para casarse con el soltero más codiciado del Reino Unido por aquel entonces, el príncipe Guillermo. Este viernes, 13 años después de aquella gran boda, viene otra. Olivia Henson, la prometida de Hugh Grosvenor, séptimo duque de Westminster, sigue los pasos de la actual princesa de Gales y se casará con el galán más rico del país, que tiene todo un reino en propiedades alrededor del mundo.
Los parecidos entre la princesa y la futura duquesa van más allá de su elección de marido. Ambas estudiaron en el prestigioso Marlborough College, un centro en el que la matrícula anual cuesta ahora unos 17.000 euros anuales y también tienen el mismo número de hermanos, las dos crecieron con un hermano y una hermana.
Hugh Grosvenor y el príncipe Guillermo en la boda de lady Tamara Grosvenor.
Olivia Henson es ejecutiva de cuentas en Belazu, una empresa de gastronomía sostenible, sigue siendo bastante desconocida por discreta. Tiene 31 años y es descendente de aristócratas y banqueros. Su árbol genealógico entronca con algunos miembros destacados de la historia británica, al igual que el de Kate Middleton.
El que fuera denominado como el soltero de oro británico por la obvia fortuna de su familia ha sido bastante discreto con la prensa desde que heredó a los 25 años más de 12.000 millones de euros tras fallecer repentinamente su padre en el 2016. Poco se sabe de su intimidad más allá de que disfruta jugando al críquet.
Aparte del extenso patrimonio de Grosvenor, el duque y la futura duquesa de Westminster también gozarán de una posición prominente en la corte real británica, pues es ahijado del rey Carlos III y es padrino del príncipe Jorge, el primogénito del príncipe Guillermo. Pese a que la princesa de Gales se encuentra retirada de la vida pública y no se espera que acuda a la boda, podrían coincidir en futuros actos oficiales.
Aunque no hay certeza de que el príncipe de Gales y el duque mantengan una cercana amistad, nobleza obliga, y, según The Times, Guillermo ejercerá de acomodador el próximo 7 de junio en la catedral de Chester. Es decir, recibirá a los invitados al enlace a las puertas del templo. La pareja escogió esa ciudad inglesa que hace frontera con Gales por su cercanía con Eaton Hall, la fastuosa mansión familiar de los Grosvenor, con unas 4.000 hectáreas, donde tendrá lugar la celebración posterior al servicio religioso.