María José Campanario se ha convertido en uno de los personajes públicos más buscados por la prensa del corazón. A pesar de sus intentos por llevar una vida discreta y anónima, la mujer de Jesulín de Ubrique ha estado siempre en el foco mediático, sobre todo por su mala relación con la colaboradora de televisión Belén Esteban.
Durante mucho tiempo, la madre de Julia Janeiro ha mantenido un perfil bajo en redes sociales, eventos, etc., pero desde que acabó el programa Sálvame en Telecinco, la odontóloga se ha relajado y se ha mostrado cómoda y feliz en plataformas como Instagram.
La catalana no duda a la hora de interactuar con su audiencia. Tan solo en su perfil oficial de Instagram, Campanario acumula más de 50.000 followers, una cifra bastante alta, pero que queda lejos del millón de seguidores que tiene la 'princesa del pueblo'.
Hace unas horas, en el día de San Valentín, María José Campanario decidió sorprender a su audiencia y subió una historia a su cuenta de Instagram mostrando un más que evidente cambio de look.
La esposa del exconcursante de Masterchef Celebrity subió una foto perfectamente maquillada y con una gran sonrisa en la que mostró a sus fans que, a partir de ahora, es una mujer con flequillo. Como banda sonora para dicha instantánea, Campanario escogió la canción Thunderstruck del aclamado grupo de música AC/DC.
Feliz en su matrimonio
Por mucho que la gente haya criticado su relación a lo largo de los últimos años, la realidad es que Jesulín de Ubrique y María José Campanario llevan casados casi 22 años y que, a día de hoy, se muestran más enamorados y felices que nunca.
Como tantas otras famosas y personalidades públicas, la barcelonesa quiso dedicar una publicación a su esposo por el Día de San Valentín. Campanario decidió subir una foto en blanco y negro a las historias de Instagram en la que se puede ver al extorero mirando a cámara con gesto dulce.
En esta ocasión, María José decidió poner de fondo una canción en euskera del artista vasco Mikel Laboa, Txoria txori, y escribió una parte de la letra del tema encima de la instantánea. ''Si le hubiera cortado las alas habría sido mío, no habría escapado (...) Pero así, habría dejado de ser pájaro. Y yo... yo lo que amaba era un pájaro'', dice la canción que dedicó la odontóloga a su marido.