Parece mentira pero hubo un tiempo en que Paulina Rubio (49) y Nicolás Vallejo-Nágera (48), más conocido como Colate, se amaban. Fruto de ese amor nació su hijo Andrea Nicolás, que ahora tiene 9 años. Y aún más mentira parece que después de separarse no hayan sabido hacerlo mejor por el bien del pequeño. La cantante y el empresario están inmersos en una dura y agria batalla judicial y mediática que no los deja en buen lugar. Hoy está previsto que ambos se vean las caras en la reanudación del juicio, en Miami, por la custodia del pequeño. Pero la situación está cada vez más complicada.
El último capítulo ha tenido lugar hace dos días. La artista mexicana conseguía que un juez impidiera a su ex viajar con su hijo a España durante unos días estas vacaciones para estar con la familia Vallejo-Nágera, entre la que se encuentra su tía Samantha, cocinera y presentadora del programa MasterChef . Colate vive en Miami para estar cerca de su hijo, pero siempre que puede viaja a España con él para estar con los suyos. La chica dorada alega miedo al contagio por el coronavirus y prefiere que se posponga la visita para otras fechas más seguras. También dice estar preocupada que por la evolución de la pandemia no pueda regresar a Miami.
En el último episodio, Paulina ha conseguido que un juez impida viajar a Colate con el niño unos días a España
Este nuevo ataque de Paulina arruinando las vacaciones a Colate, que ya las tenía más que planificadas, está motivado por la estrategia que viene siguiendo él para conseguir la custodia del niño. Hace unos meses, el empresario aseguró ante la Corte de Miami que Andrea Nicolás vive en un ambiente “tóxico y violento” y que la mexicana no está en las mejores condiciones para cuidar de él. Además, también arremetió contra la madre de la artista, la actriz Susana Dosamantes, y su hermano Enrique, a los que demandó por malos tratos. Eso enfureció a Paulina, dispuesta a utilizar toda la artillería legal de que dispone contra Colate.
La pareja se casó en el 2007; en el 2010 dieron la bienvenida a su único hijo en común y se divorciaron tras cinco de matrimonio, cuando el pequeño tenía poco menos de dos años. Desde el momento que se separaron, las acusaciones mutuas han sido constantes. Colate ha lamentado –en la cadena mexicana Imagen Televisión– que Andrea Nicolás es cada vez más consciente de la trifulca entre sus progenitores: “Como todos los niños, se dan cuenta de todo, además, nuestro hijo está ya cerca de cumplir 10 años, ya no es un bebé. No solo se da cuenta, sino que razona y saca sus propias conclusiones”.
En el 2014 la expareja llegó a un acuerdo de custodia compartida, pero sus enfrentamientos judiciales no pararon. En abril del 2019, Rubio demandó a su exmarido por ocultarle el paradero de su hijo durante el tiempo que pasó con él. Según ella, durante tres semanas Vallejo-Nágera le habría impedido mantener con regularidad contacto telefónico y por videollamadas con su hijo.
El pasado mes de mayo Colate demandó a su exesposa para solicitar la custodia de su hijo, pero el tribunal denegó su petición. Los abogados del empresario argumentaron “comportamiento inestable” y “episodios severos de desequilibrios mentales” de la madre. Por ello, solicitó a las autoridades realizar una “evaluación mental y física” a la cantante. Además, presentó como prueba un video que la mexicana protagonizó en abril en el que aparecía en su casa –desde donde participaba en un concierto para luchar contra el coronavirus– haciendo unos extraños movimientos y hablando de una manera que muchos interpretaron que la artista iba drogada y que le da a la cocaína.
Aquí, el culebrón tiene uno de sus puntos álgidos. Rubio se sometió voluntariamente a un test de detección de drogas para desmentir que sea consumidora de cocaína. Y, a pesar de que la intención era terminar con los rumores y habladurías sobre ella y limpiar su imagen por el bien de su guerra por la custodia, el análisis para la detección de nueve tipos de droga concluyó que durante un concierto en California, en febrero, la artista había consumido marihuana, la única sustancia en la que dio positivo.
Hoy, la cantante y Colate se volverán a ver las caras en los juzgados y será el magistrado el que valore este positivo y cómo afectará esto al caso.