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Antonio Carmona: “Yo estoy loco por subirme a un escenario

Nuevos retos

El líder de Ketama ha participado en un desayuno virtual organizado por Citroën desde Cádiz, donde ha estado confinado con su mujer y sus hijas

El músico Antonio Carmona, embajador de Citroën, con el UV Citroën C5 Aircross, en una d elas playas de Cádiz

Citroën

“Yo estoy loco por subirme a un escenario, loco por viajar, loco por agarrar un coche y salir de aquí. Y de encontrarme con el público y ver cómo se les ilumina la cara cuando tocas tus canciones, que es lo mejor que te puede pasar”, dice con cierto tono de desespero Antonio Carmona, el líder de Ketama. Pisó por última vez un escenario el pasado 7 de marzo y está deseando que llegue el 31 de julio para volverlo a pisar. Su primer concierto, después del confinamiento, será en Barcelona, en Les nits del Fòrum y lo abrirá con Te miro y tiemblo , una canción de su amigo Pau Donés, cuya muerte reconoce que le ha afectado mucho.

Carmona (55) ha sido el protagonista del segundo desayuno virtual sobre Nuevos hábitos, nuevas iniciativas , organizado por la marca de coches Citroën, y que inauguró hace unas semanas la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada, sobre los nuevos retos de la sociedad tras la pandemia. El líder de Ketama charló con los medios por videoconferencia desde su casa de Cádiz, donde ha estado todos estos meses confinado: “Yo, gracias a Dios, aquí en Cádiz tengo un cachito de parcela donde he podido salir. Pero hay gente que lo ha pasado muy mal, confinada entre cuatro paredes, sin entrar un rayo de luz…”, comenta.

Antonio Carmona con su mujer Mariola Orellana, que es representante de artistas, y con quien tiene dos hijas, Marina y Lucía

Daniel Gonzalez / GTRES

Dice que por respeto a esas personas que han sufrido estos meses en casa “no he querido colgar cosas mías, mis composiciones. Ha sido una forma de apoyarlos. Sí que he compartido cosas solidarias y tranquilizadoras”, explica el embajador del UV Citroën C5 Aircross, que durante estos meses ha realizado acciones de ayuda de las que se siente muy orgulloso, pero ha rehusado entrar en detalles.

Acostumbrado a pasar muchas horas encerrado en su estudio componiendo sus canciones, estos días de confinamiento han sido positivos en este sentido, para el artista granadino: “Tengo muchas cosa escritas de momentos que uno vive, en los que echa de menos cosas de tu vida, de lo cotidiano”. Y añade, “principalmente he escrito sobre lo débiles y lo sensibles que somos y sobre la libertad. Estar metidos en casa sin poder salir ha sido ‘superheavy’”.

Su primer concierto será en Barcelona el 31 de julio y lo abrirá con la canción ‘Te miro y tiemblo’ de su amigo Pau Donés

Personalmente lo peor para él han sido los cuatro meses que lleva sin ver a su madre y lo mejor, haber podido pasar todo este tiempo con su mujer, Mariola Orellana y sus dos hijas, Marina y Lucía, que también se dedican a la música: “Han sido meses de estar muy unidos y muy juntos”. Aunque reconoce que después de tantos días han habido algunos roces, pero “ha habido más momentos buenos que malos”. Además cuenta divertido que su mayor descubrimiento durante estos días ha sido ver cocinar a su mujer, que habitualmente vive pegada a un teléfono por cuestiones profesionales, y que es representante de artistas: “Lo que más me ha sorprendido es la mano que tiene para la cocina. Nos ha hecho unos arroces que no veas y hemos cogido peso todos”, presume.

Y sobre los nuevos hábitos para el futuro a corto plazo lo tiene claro: “Ahora nos tenemos que abrir a una nueva realidad, olvidar un poco de lo que ha pasado, cumplir con las medidas para que no haya un rebrote ni nada de eso, pero ir al bar, ver al vecino, ver el fútbol...hacer ese tipo de cosas sencillas que parece que no son nada, pero son la vida y, sobre todo, pintarnos una sonrisa en la cara”.