Debido al debate y las protestas que se han abierto en el mundo sobre el racismo a raíz del asesinato de George Floyd en Estados Unidos a manos de la policía, la cantante británica Mel B ha decidido sincerarse en las últimas horas sobre su propia experiencia con las discriminaciones raciales que le ha tocado vivir a lo largo de los años.
Según ha dicho la ex Spice Girl de 45 años en declaraciones al periódico Daily Star, a lo largo de su carrera siempre ha sentido la obligación de mantenerse firme para proteger su “identidad” de todos aquellos que trataban de diluirla o hacer invisible por el color de su piel: “Gran parte del racismo que sientes como una persona de color que crece en una cultura mayoritariamente blanca no se habla en voz alta”.
De acuerdo con sus confesiones, el problema con el que se ha encontrado Mel B durante toda su vida comenzó a hacerse visible cuando tan solo era una niña e iba a la escuela en su Leeds natal. Allí, según dice, era discriminada y acosada todos los días por los otros niños, que la perseguían hasta casa y le gritaban terminos despectivos.
A pesar de abandonar ese entorno y despegar años más tarde con el éxito descomunal de Wannabe, el tema que lanzó al estrellato a las Spice Girls, el racismo y los episodios desagradables no cesaron por su fama. “Cuando grabamos el videoclip de Wannabe teníamos un enorme equipo de estilistas y una de las primeras cosas que me dijeron es que iban a tener que alisarme el pelo. Me negué rotundamente porque mi pelo era mi identidad y lo que me hacía diferente al resto. Y en las Spice Girls precisamente teníamos que celebrar nuestras diferencias: en eso consistía nuestro mensaje”, ha asegurado la británica, que ha querido sincerarse sobre uno de los momentos más violentos de sus días de gira con la banda.
“Hubo momentos en los que había un racismo obvio, una vez me pidieron que saliera de una tienda de ropa de alta costura en Sun City cuando estaba con las chicas”, ha recordado Mel B, que recuerda que en esa ocasión en concreto en Sudáfrica en 1997, cuando actuaron frente al príncipe Carlos de Inglaterra y Nelson Mandela en 1997, sus compañeras la respaldaron: “Me sentí humillada, pero no sorprendida. Las otras chicas se indignaron y empezaron a chillar a la dependienta. Estaba enfadada y muy triste porque mucha gente en la Sudáfrica de después de la llegada Mandela siguiera siendo racista”.
Aunque esa experiencia la marcó, la ex Spice Girl admite que con el tiempo aprendió a no tolerar esos abusos y discriminaciones y se impuso en la industria para conseguir un trato igual que el de sus compañeras, que trataron de implicarse siempre en la lucha y apoyarla.
Ante la noticia de la muerte de George Floyd y la reacción que ha habido por parte de la población de medio mundo desde hace algunas semanas, Mel B asegura sentirse extremadamente orgullosa de las protestas y del movimiento Black Lives Matter (Las vidas negras importan) en general. Por eso, la británica ha concluido su intervención haciendo un llamamiento a las otras celebridades y a sus fans a “seguir educándose” y “seguir luchando” por la justicia y la igualdad.