Gisela y Manu Tenorio: juntos y cómplices en la Costa Brava por un motivo incuestionable
Todo por los niños
Los dos veteranos de OT asistieron a gala anual del Sallés Hotel & Spa Cala del Pi, que consiguió recaudar 45.000 euros para la investigación del cáncer infantil
Lo ha vuelto a lograr. La gala anual del Sallés Hotel & Spa Cala del Pi (Platja d’Aro, Girona) para la investigación de la leucemia infantil de células B se ha superado una vez más: 45.000 euros fueron recaudados en una cena benéfica en coordinación con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y Catalunya Contra el Cáncer de Girona. Paula, hija de la empresaria y organizadora del evento Yolanda Sallés, lanzó un mensaje insoslayable a los adultos: “Seguid luchando, seguid por nosotros. En el futuro os compensaremos”. La gala fue presentada por la periodista Cristina Cubero, profesional de Mundo Deportivo, y contó con la actuación de Manu Tenorio.
Entre los personajes invitados, además del cantante sevillano y su mujer, Silvia Casas, asistieron su ya vieja amiga Gisela Lladó, la medallista en sincronizada Thaïs Henríquez, Jordi Dalmau, Mireia Canalda con Felipe López, Lídia Torrent, Elsa Anka, Sofía del Prado y la diseñadora Pilar Oporto. Finalizada la gala, todos acabaron aplaudiendo la versión de Sweet Caroline con que el compositor y guitarrista Dani Galiot –el mismo de la La Rambla – cerró una jam sesión inolvidable bien avanzada la madrugada.
No solo Tenorio
Además del cantante sevillano y su mujer, Silvia Casas, asistieron su ya vieja amiga Gisela Lladó, la medallista Thaïs Henríquez, Jordi Dalmau, Mireia Canalda con Felipe López, Lídia Torrent, Elsa Anka, Sofía del Prado y la diseñadora Pilar Oporto
Manu Tenorio y Chenoa comparten no solo un pasado común en la Academia de OT sino una imagen para la posteridad: si ella ha conseguido convertir aquella estampa desolada en chándal, el día en que supo que estaba soltera por la prensa, Manu está cerca de lograr lo mismo con la foto de sus brazos vendados. El artista sufrió un grave accidente doméstico hace poco más de un año que le costó caro y que a punto estuvo de ser impagable.
Hoy, recuperado casi al cien por cien, consigue hacer broma de lo ocurrido. Y lo celebramos: “Me quedan determinados retoques estéticos, en las manos y los brazos para colorear la piel. Me tendría que haber protegido más del sol, pero… ¡ay!”, se lamenta con una sonrisa el cantante. “Mirando en retrospectiva y considerando lo que podría haber sido, lo cierto es que pudo haberse complicado muchísimo más. Lo pasé mal. Tenía los brazos grapados para sostener la tensión de la piel”.
Larga lista de vips
El artista sufrió un grave accidente doméstico hace poco más de un año que le costó caro y que a punto estuvo de ser impagable. Lejos de dedicarse a la vida contemplativa, Tenorio dio una respuesta completamente opuesta: subió al escenario para cantar”
Tras el accidente, lejos de dedicarse a la vida contemplativa, Tenorio dio una respuesta completamente opuesta: “Al mes escaso del accidente tenía un concierto en Marrakech y subí al escenario, dopado hasta las orejas y con unos guantes negros pero canté. Esa actitud positiva y luchadora fue también una manera de motivarme. Pero hay que ser rigurosos y luego seguí con mi recuperación. No fue fácil, tuve que pasar de nuevo por quirófano para un trasplante de piel… Ya no quiero darle muchas vueltas. Lo que sí me ha quedado claro es que ¡no hay que meter la mano en los fusibles! (risas)”.
Mientras que estuvo convaleciente, Manu Tenorio continuó trabajando y ello le permitió publicar el disco Nosotros en la noche a comienzos de este año. Tras la gira de verano y el cambio de oficina, Tenorio se muestra entusiasmado con su nuevo equipo: de hecho, está a punto de cerrar una serie de actuaciones en México para 2020, país del que ha bebido mucho en cuanto a boleros se refiere.
Polifacética
Gisela no descansa: con una gira de conciertos sinfónicos en marcha, va a volver a su canal de Youtube y el resto del tiempo se lo roba un proyecto de diseño de complementos en fase aún embrionaria
Gisela no quiso faltar a una cita solidaria con los niños como protagonistas. Acompañada de su novio, el fotógrafo José Ángel Ortega, nos explicó en qué está ahora mismo embarcada: “Estoy con una gira de conciertos sinfónicos, con un repertorio familiar de mis canciones más conocidas. Y voy a reprender mi canal de Youtube, que funcionó muy bien y tuve que interrumpir por cuestiones personales. Ya tengo material para empezar de nuevo”.
Como su compañero Manu, Gisela celebra el acortamiento de distancia del artista y sus seguidores gracias a las redes sociales: “Además te da mucha autonomía para hacer lo que tú quieres, porque muchas veces tratan de dirigirte en función de cómo está el mercado y eso no encaja contigo. Aquí tienes tu feudo. Puede ir mejor o peor pero estás a gusto con lo que haces”.
La artista catalana no descansa: el resto del tiempo se lo roba un proyecto de diseño de complementos en fase aún embrionaria. Que estemos en una gala donde los niños son lo más importante, nos deja en posición inmejorable la última pregunta: ¿Qué hay de los propios? A Gisela le gustaría ser madre pero no se deja presionar ni obsesionar por ello. “Cuando vengan, bienvenidos serán”.
Pareja asentada
Lídia Torrent acudió con su novio, el futbolista Jaime Astraín. Aunque muy joven, no es nueva en el negocio y evita posar con él a solas
Su presencia aquí no era gratuita: aunque Lídia Torrent no lo cuenta, sabemos que cada mes dona su aportación a varias fundaciones. Le da pudor decirlo en voz alta, así que le echamos un cable. Torrent acaba de llegar del crucero que la ha tenido varias semanas grabando un nuevo formato para ‘First Dates’: los muchos candidatos/as a dejar la soltería han buscado su destino amoroso durante un crucero por el Mediterráneo. “Las pasiones se han desatado. Imagina una cita en alta mar, además del restaurante, todos los escenarios que ofrece un barco: camarotes, jacuzzi, piscina con un mojito… Todo ha acompañado a que al amor haya fluido aún más”. Ahora el trabajo es ya del equipo de edición de Cuatro.
Este ha sido el primer evento al que Lídia Torrent acude con su pareja, el futbolista Jaime Astraín. Aunque muy joven, no es nueva en el negocio y evita posar con él a solas. Se ruboriza cuando se le pregunta abiertamente por él, así que concede al fin admitirnos que es feliz. Muy feliz.