Marca de moda nacida entre viaje y viaje
Emprendedores
Skua!! llega a la mayoría de edad habiéndose hecho un nombre en el Vallès Oriental y las comarcas colindantes
Todo empezó hace 22 años, cuando Laia Monserdà y Àlex Ruiz se encontraron una máquina de coser en la basura. En aquel entonces, la pareja vivía en Londres y fue su compañera de piso quien les enseñó cómo utilizarla. Ruiz puso los conocimientos en práctica cosiéndose unos pantalones con la tela de una tienda de campaña que también se había encontrado en la basura. Después de Londres, la pareja estuvo viviendo un año en América Latina, donde aprendieron a hacer artesanía con joyas. Fue en el otro lado del Atlántico donde Monserdà y Ruiz empezaron a vender sus creaciones con la marca Skua!! Sin embargo, Skua!! como marca de ropa y complementos nació tras una estancia de ocho meses en la India. “Conocimos a muchas personas que compraban cosas en la India para venderlas aquí y empezamos a hacer lo mismo con joyas y camisetas que estampábamos nosotros mismos”, recuerda la emprendedora.
Durante un tiempo, la pareja se dedicó a viajar durante cuatro o cinco meses del año y el resto del tiempo lo invertía en ganar dinero para volver a viajar. “Trabajábamos para poder seguir viajando”, explica Ruiz. Su modus vivendi consistía en comprar la materia prima en los países que visitaban y en vender sus creaciones en los periodos que estaban en Mollet del Vallès. No fue hasta el año 2010 que empezaron a confeccionar con talleres de la zona para generar negocio local.
En el 2024, Monserdà y Ruiz cumplen 25 años como pareja y 18 como impulsores de Skua!! Su asistencia a ferias y su actividad en redes sociales ha conseguido que la marca (y sus fundadores) sea conocida en el Vallès Oriental y las comarcas colindantes. También venden a través de su página web y cuentan con presencia en cinco tiendas físicas, ubicadas en Reus, Barcelona, Zaragoza, Bilbao y Girona.
A dos manos
Àlez Ruiz y Laia Monserdà han aprendido a hacerlo todo ellos solos, desde cero. La pareja hace los diseños, el patronaje, va a las ferias a vender, gestiona las redes sociales, toma las fotografías y también hacen de modelos. De lo único que no se ocupan es de la confección de las prendas, que tiene lugar en un taller familiar de Mataró, “de los de toda la vida”, le gusta remarcar a Monserdà.