Saber ahorrar es una virtud y más en un momento en el que casi la mitad de hogares españoles han tenido que modificar su estilo de vida por la inflación. Por culpa de la subida de precios el 33% ha tenido que cambiar algún aspecto importante y el 12% no puede mantener el estilo de vida que llevaba, según el Observatorio Cofidis de Economía y Sostenibilidad en el Hogar 2023. El estudio revela que el 26% de los hogares, 1 de cada 4, no puede ahorrar a fin de mes.
Una alternativa, siempre que sea posible y haya margen, es seguir la regla 50/30/20, que en teoría permite ahorrar con cualquier salario.
La regla, surge del libro All Your Worth: The Ultimate Lifetime Money Plan, publicado en el 2005 por la senadora estadounidense y experta en insolvencia de la Universidad de Harvard, Elizabeth Warren, y su hija Amelia Warren Tyagi. A grandes rasgos consiste en dividir los ingresos mensuales en 3 categorías y a cada una destinarle un porcentaje concreto de los ingresos: un 50% a necesidades primarias como alimentación o ropa; un 30% a caprichos como viajar o la entrada de un concierto; y un 20% a ahorro.
Por ejemplo, con un sueldo de 3.000 euros se tendrían que destinar 1.500, 900 y 600 euros respectivamente. Así, en el año se ahorrarían 7.200 euros. El problema es que, teniendo en cuenta que el sueldo medio en España es de alrededor de 1.500 euros al mes, es fácil que más de la mitad de la nómina se vaya a pagar vivienda, comida y suministros. En ese caso es recomendable fijar un porcentaje de ahorro teniendo en cuenta la situación económica.
Para evitar despilfarros es importante apartar el porcentaje que equivale al ahorro al cobrar la nómina. Así se tiene clara desde el principio la cantidad que se puede gastar. Lo recomendable es ingresar lo que va a ahorro en una cuenta del banco que no sea la habitual.
El porcentaje de ahorro también se puede subdividir o reducir. Se puede tener un porcentaje como colchón de seguridad para cubrir posibles incidencias -reparaciones, cambio de un electrodoméstico- y otro para un objetivo concreto que se tenga en mente o una compra importante como una vivienda o un coche.
Tener un objetivo puede ayudar a cumplir correctamente con el plan de ahorro y no caer en la tentación de gastar parte de ese dinero en otras cosas.
La mayor dificultad está en topar al 30% el gasto en cosas prescindibles
“La regla 50/30/20 es un método cada vez más extendido y aceptado por todos aquellos que, además de ahorrar para el futuro, quieren tener un control de lo que gastan mensualmente de una manera fácil y sencilla”, afirman desde Cofidis.
En la compañía financiera explican que la mayor dificultad que tiene la gente para cumplirla es la de seguir de manera estricta el 30% del gasto en cosas prescindibles, que en su mayoría se hacen para aumentar la calidad de vida, como salir a cenar fuera de casa, ir al cine, la suscripción a una plataforma o la cuota del gimnasio olvidada. Fuentes de la empresa remarcan que la mayoría de las familias españolas no quiere ni tienen previsto renunciar a las vacaciones, así que recortar se convierte en un paso obligado.
"Sin una nómina que te lo permita los gastos corrientes te comen gran parte del salario"
Para Antoni Cunyat, profesor de economía en la UOC, es una regla buena siempre que sea sistemático ahorrando. “No todo el mundo lo puede hacer. Tienes que tener una nómina que te permita hacerlo porque los gastos corrientes te comen gran parte del salario”, asegura.
Como es difícil hacer crecer los ingresos, la vista hay que ponerla en lo que se gasta. Cunyat recomienda “hacer una radiografía del gasto, anotando cada mes todas las partidas para calcular el gasto corriente y cuánto se puede destinar a ahorros”. Otros consejos que da son plantearse la idoneidad de los suministros que se pagan, como la luz, el gas o el teléfono, y si se pueden disminuir los gastos cambiando de compañía o contratando menos potencia en el caso de la electricidad. También recomienda comparar diferentes tiendas o supermercados en los que se compra para reducir el gasto en comida, uno de los que más pesan hoy en casa con la hipoteca o alquiler.
Aunque la regla 50/30/20 se extiende, no es la única. Existen otros métodos como el de imaginar que el ahorro es un gasto y por lo tanto a principios de mes mover parte de nuestro dinero a otra cuenta bancaria destinada a ese fin, pero sin una cifra concreta. O el reto de los 30 días que consiste en, empezando por un euro el primer día del mes, ahorrar cada día uno más que la jornada anterior hasta el día 30 y empezar de nuevo al siguiente mes. Si se repite constantemente, al acabar el año se conseguirán ahorrar casi 5.600 euros.