Año negro para el mercado del coche eléctrico en Alemania
Automoción
La inflación y la retirada de las ayudas hunden las ventas un 27%
La venta de coches eléctricos en Alemania se hundió el año pasado un 27% en medio de la transición del vehículo de combustión al libre de emisiones. Según un comunicado de la agencia federal del automóvil KBA, en 2024 se matricularon 381.000 vehículos eléctricos en el país. La caída del 27,4% se produce después de cinco años de fuerte crecimiento de las matriculaciones.
La reconversión de la industria del motor pasa por que los clientes confíen en los vehículos eléctricos e impulsen las ventas. Los datos del año pasado muestran que todavía no es así, ya que la cuota de mercado de ese tipo de modelos es inferior a la del 2023, cuando representaron el 18,4%. El año pasado bajó al 13,5%.
Las razones que hay detrás del mal dato del 2024 son la elevada inflación, que ha ralentizado el consumo en la primera economía de la zona euro, y la retirada de las ayudas públicas a la compra de vehículos “limpios”, que se produjo hace ahora un poco más de un año.
El descenso de la venta de los eléctricos fue muy superior al del conjunto del sector, que descendió un 1%. Las matriculaciones totales se elevaron a 2,8 millones. La citada caída del 1% se produjo después de dos años consecutivos de aumento. Con 992.000 unidades nuevas, los motores tradicionales recuperan incluso terreno frente a los eléctricos. El incremento fue del 1,4%.
La sorpresa vino del lado de los vehículos híbridos, que cuentan con un motor de combustión y con uno eléctrico que suele tener una autonomía muy escasa. Ese tipo de coches consiguieron un incremento anual del 12,7%, y representan ya una de cada tres ventas. Se matricularon 947.398.
Algunos analistas creen que el mercado deberá reaccionar y los fabricantes se verán obligados a bajar precios de los eléctricos para recuperar ventas. El problema es que esa posible bajada de precios afectará a los márgenes de las empresas. Además, a partir de este año las ventas de los dos tipos de coches (eléctricos y de combustión) estarán más interrelacionadas. Los fabricantes deberán supeditar la producción de coches de combustión a la fabricación de eléctricos para cumplir con los objetivos de rebaja de emisiones.
Para atraer a los consumidores, el canciller socialdemócrata Olaf Scholz, en campaña para las elecciones legislativas de finales de febrero, aboga por una bonificación europea para la compra de coches eléctricos.