El director general, Valentín Rossi, junto al material de reciclaje que usan para la producción
Con 191 años de historia, Alier es una de las papeleras más antiguas de España. Una superviviente. La última gran crisis de esta compañía de Rosselló (Segrià) fue en el 2014, cuando presentó un concurso voluntario de acreedores al que logró sobrevivir, pero no sin sufrir cambios importantes: la familia de empresarios argentinos Pereira, a través del fondo Green Future Investments, adquirió el 95% de la propiedad a la familia Alier.
“Con la entrada de Green Future Investments, en el 2018, se empezaron a aplicar criterios ESG (de las siglas en inglés de ambientales, sociales y de gobierno corporativo) y ahora Alier vuelve a ser una empresa rentable y saneada de deuda”, afirma Valentín Rossi, quien aterrizó en la compañía con la llegada de los Pereiras y ahora ejerce de director general. En el 2022, la empresa alcanzó una facturación de récord, cercana a los 200 millones de euros, con ventas a más de 30 países de todos los continentes, siendo Oriente Medio el principal mercado con entre el 25% y el 30% del negocio.
La empresa alcanzó en el 2022 una facturación récord cercano a los 200 millones
Ya sin deuda que pagar, esta compañía -cuyo producto principal es papel para placas de yeso que fabrica a partir de papel y cartón reciclado- ha apostado por la innovación, las energías renovables y el ahorro de agua. Acaba de anunciar el lanzamiento de un papel elaborado, en parte, a partir de residuos del reciclaje textil. Está especialmente pensado para la fabricación de bolsas de compra, es fruto de la inversión en I+D de la compañía. “Hemos creado un equipo de I+D que está integrado por siete mujeres y cuenta con un presupuesto de cinco millones, que queremos ampliar hasta los 17 millones en el 2030”, señala Rossi.
La sostenibilidad es la otra gran apuesta de Alier. La compañía se ha propuesto ser neutra en emisiones de gases de efecto invernadero antes del 2025. Para ello, junto a la energética Engie, está ultimando la puesta en marcha de una planta de biomasa forestal para la generación de energía térmica y eléctrica que le permitirá prescindir de gas de origen fósil. La instalación ha supuesto una inversión de 25 millones de euros.
Para desenchufarse de la red eléctrica, Alier tiene previsto destinar seis millones a la instalación de 10 MW en paneles solares fotovoltaicos, pero el parque está pendiente de permisos (también la planta de biomasa). Por otro lado, la compañía quiere reducir su consumo de agua entre un 30% y un 40% gracias a un proyecto que supondrá una inversión de seis millones, de los cuales tres proceden de los fondos europeos.
Las inversiones, junto al esfuerzo para incrementar la presencia de mujeres (ahora representan el 17% de la plantilla frente al 9% del 2010), le han valido ser distinguida como empresa BCorp. También ha sido reconocida como la Mejor Empresa de Catalunya 2023 por la Generalitat.