El aceite de oliva sube un 67% y contribuye a encarecer aún más la cesta de la compra
En septiembre
El alza es de nueve décimas y viene acompañada del persistente encarecimiento de los alimentos, del 10,5%, y del aceite de oliva, del 67%
La energía, con la electricidad y los carburantes al frente, es la principal causante del repunte de la inflación, situada de nuevo en los niveles más elevados desde abril. El Índice de Precios de Consumo (IPC) quedó en septiembre en el 3,5%, nueve décimas más que un mes antes, tras experimentar la mayor subida desde junio del 2022, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirman los adelantados a finales del mes pasado.
La inflación subyacente, que excluye alimentos no elaborados y energía, también ha quedado en el nivel del que ya informó el INE hace unos días, del 5,8%, tres décimas menos que un mes antes. Es la menor tasa en un año y tres meses y contrasta con el 7,6% alcanzado en febrero de este año.
Los alimentos siguen teniendo un componente decisivo sobre la evolución de los precios, con una subida interanual del 10,5% que los consolida durante dieciocho meses por encima de los dos dígitos, con el aceite de oliva, el arroz, el azúcar y las patatas entre los productos que más se encarecen.
Tres meses consecutivos de subidas de los carburantes entre el 6,5% y el 9,9%
Sin embargo, el factor novedoso que ejerce presión adicional sobre el IPC es la energía. Los carburantes han pasado de ser un 18,5% más barato en agosto que hace un año, cuando estaban en niveles récord, a situarse en el 11,9%. Siguen por debajo de septiembre del 2022, pero en realidad el efecto no es positivo porque en términos mensuales no dejan de subir de precio: un 6,5% en julio, un 9,9% en agosto y un 7,1% en septiembre.
Algo parecido ocurre con la electricidad, que es más barata que hace un año, pero bastante menos que en agosto, lo que desbarata el porcentaje final. Este insumo baja un 38% de precio en septiembre frente al mismo mes del 2022, pero en agosto el retroceso era del 49%.
El aceite de oliva se acerca a las subidas interanuales del 70%
Lo que no deja de subir a tasas de doble dígito son los alimentos, convertidos en una de las principales preocupaciones para los consumidores. En términos interanuales, el aceite de oliva sube un 67%, por delante del 41,9% de los aceites genéricos y las grasas, del 40% del azúcar, del 14% de carnes como la de porcino, del 12,7% de los refrescos o del 11,5% de los huevos.
Si se toman las grandes categorías de productos, los alimentos, con un 10,5%, son los que más suben, por delante del 6,3% de hoteles y restaurantes, del 5% del ocio y la cultura, y del 3,8% del transporte, que es donde se incluyen los carburantes.
El IVA reducido de los alimentos seguirá hasta el 31 de diciembre
Los datos publicados hoy esconde una buena noticia para los consumidores, que seguirán disfrutando de una rebaja en el IVA de algunos alimentos básicos hasta el 31 de diciembre. Esta medida se prorrogará a partir del 1 de noviembre gracias a que la tasa interanual de inflación subyacente ha quedado en septiembre por debajo del 5,5%.
Los precios de los alimentos distan todavía de quedar contenidos, aunque las subidas tienden moderarse. La de septiembre, del 10,5%, es similar a la de agosto y tres décimas inferior a la del 10,8% de julio. Queda por debajo del repunte de febrero, cuando esta categoría llegó a encarecerse un 16,6% en términos interanuales.
"Un repunte algo superior a lo previsto"
Para los expertos, el principal motivo de preocupación se encuentra ahora en la energía. "Es un repunte algo más pronunciado de lo que pensábamos. Lo vemos en los carburantes y la electricidad, y se traslada rápidamente a la alimentación y otras parcelas", explica Raymond Torres, director de Coyuntura Económica de Funcas. En todo caso, Torres detecta que "el núcleo central de precios está afianzando una desescalada", lo que se aprecia también en los alimentos elaborados.
Su previsión es que, en término interanuales, la inflación se mantenga cerca del 5% hasta fin de año y empiece a moderarse el año que viene. Sin embargo, todavía seguirá por encima del 2% hasta el 2025, advierte Torres.
Retirada de ayudas a fin de año
"Hay cierta sorpresa en cuanto a algunas partidas como los carburantes y el precio de la electricidad", indica Manuel Hidalgo, senior fellow de EsadeEcPol y profesor de la Universidad Pablo de Olavide. Este encarecimiento y el que pueda producirse de manera adicional fruto del conflicto entre israelíes y palestinos "aconsejarían retrasar unos meses, quizá hasta primavera, la retirada de las ayudas del Gobierno" para contener la inflación de los alimentos y el transporte puestas en marcha tras la invasión de Ucrania.
Su previsión es que a lo largo del año que viene la inflación se modere y quede en torno al 3%. "Si se quitan las ayudas, puede haber un repunte de inflación y un mensaje a la ciudadanía que puede resultar pernicioso de cara a aspectos como la revisión de los convenios", advierte. "Dada la nueva realidad, sería beneficioso ampliarlas unos meses".
El Gobierno destaca que la subida es inferior a la de la zona euro
Desde el Ministerio de Asuntos Económicos atribuyen el repunte de inflación a la electricidad y a los carburantes, pero sobre todo a su efecto base. Hasta ahora, la comparación se hacía con unos niveles de precios en el verano del 2022 muy elevados, de modo que el dato interanual de inflación era reducido, pero a partir de ahora, dada la moderación iniciada hace un año, lo previsible es que el porcentaje sea mayor.
Asuntos Económicos también destaca que España lleva más de un año entre los países con menor inflación de la zona euro, tras bajarla casi 5,5 puntos en un año.
En todo caso, con esta subida la inflación encadena cuatro meses al alza. El encarecimiento de los precios en términos interanuales coincide con un leve descenso, del 0,2%, si se realiza la comparación con respecto al mes anterior y no frente a septiembre del 2022. En la comparativa mensual, la rúbrica de transporte es la que ejerce mayor presión al alza por el encarecimiento de los carburantes.