Barbie lo tiene todo para seguir siendo un año más la reina preferida de las niñas en Santa Claus o los Reyes Magos sin que nadie pueda aprovecharse de su singular belleza. El Tribunal General de la UE rechazó ayer las pretensiones de la juguetera china Jieyang Defa Industry de registrar en la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE como dibujo o modelo comunitario una cabeza sospechosamente parecido a la testa de la novia de Ken.
El empeño de la firma asiática viene de muy lejos, de mayo del 2014 en Alemania, que es cuando Jieyang trató de proteger su diseño... de posibles imitadores. Mattel detectó el presunto plagio y en agosto del 2017, presentó una demanda de nulidad de dicho dibujo o modelo, sosteniendo que este carecía de carácter novedoso e individual en relación con los dibujos o modelos anteriores Poupée Defa y Sculpture Barbie. A falta de ver la muñeca competidora en las jugueterías, el diseño de la cabeza era sospechosamente similar.
Barbie
Y, por dos veces seguidas, la resolución consistió en dar la razón a los creadores de Barbie. El argumento de la Oficina de Patentes fue que el creador goza de un amplio grado de libertad al diseñar cabezas de muñeca, puesto que la única limitación reside en que esas cabezas deben tener las características básicas de un ser humano. Por eso, estimó que, al formar la cabeza parte de una muñeca, el usuario informado sería en este caso cualquier miembro del público en general, desde un niño a un adulto, que compraría la muñeca para su hijo o como objeto de colección; por último, consideró que llamaría la atención del usuario informado el hecho de que ambos dibujos o modelos presentaran una cabeza de muñeca cuyo rostro tiene forma oval y características y proporciones idénticas, un maquillaje muy similar y una expresión idéntica. Es decir, ante la posibilidad de hacer cabezas de muñeca con formas, expresiones y combinaciones muy diferentes, no se podía admitir el registro de la cabeza china por su evidente parecido a Barbie.
El último intento
En su demanda final, la firma china dijo que se vio forzada a diseñar así la cabeza de la muñeca por los cánones de belleza actuales
La china Jieyang Defa Industry no se rindió y acudió al Tribunal General de la UE. En su demanda, la compañía insistió en sus pretensiones con argumentos un tanto contradictorios. Por un lado, sostuvo que las cabezas no eran tan iguales como se había dicho. Por otro, para el caso de que lo anterior no se diera por bueno, argumentaba que la necesidad de responder a las preferencias del mercado en lo que respecta a la comercialización de "muñecas modelo" no le había dejado alternativa. Según la demandante, las cabezas de las muñecas tienen que respetar determinados cánones de belleza, como los de una chica joven de ojos azules maquillada. Como ese es el modelo que se acepta comúnmente como atractivo, hay que diseñar las cabezas de muñecas así para vender.
La sentencia desmonta todos los argumentos y dice que la empresa china tenía toda la libertad y posibilidades de crear cabezas distintas a las de Barbie, con independencia de las tendencias del mercado, que no pueden ser un salvoconducto para copiar. "El objetivo de crear una muñeca atrayente no exige copiar la expresión del rostro de un dibujo o modelo anterior" debidamente registrado. En consecuencia, confirma la denegación del registro del dibujo a la empresa china y la condena en costas.
Según Manuela Mendigutía, abogada y responsable de marca internacional de Pons IP, "se evidencia una vez más la importancia de contar con la correcta prueba para sustentar un procedimiento como este, no debiendo obviar nunca la relevancia de una correcta protección de los activos intangibles dentro de una empresa". En este caso, la experta citada considera que "se ha de valorar, desde el derecho de autor, hasta el registro de signos no convencionales tales como la marca tridimensional, cuando ostenten el carácter distintivo suficiente y los diseños, siempre que éstos cumplan los requisitos de novedad y carácter singular, ambos esenciales para que no sean objeto de anulación, como ha ocurrido con el registro de Jieyang".