Wall Street borra las ganancias de la era Trump con otro desplome
Emergencia económica
El Dow Jones vive el peor mes de su historia al perder un tercio de su valor
Tras el enésimo batacazo (-6,28%) de un marzo negro, el Dow Jones se situó ayer por debajo de los 20.000 puntos, una cota de alto nivel simbólico y político: significa que la bolsa, en pleno año electoral, ya está por debajo de cuando dejó la Casa Blanca el anterior presidente, Obama. De esta manera, Trump ya ha perdido todo lo que había ganado, unos 12 billones de dólares en su capitalización a lo largo de su mandato, gracias a los recortes fiscales.
Como muestra de los nervios, Wall Street tuvo que suspender la negociación durante quince minutos por cuarta vez en una semana para contener la volatilidad. Los inversores nunca olvidarán este marzo del 2020, en el que el Dow se ha anotado las cuatro peores caídas en puntos de la historia y ha perdido, hasta ahora, un tercio del valor. Definitivamente, es el peor mes de la historia de la bolsa norteamericana.
El Deutsche Bank cree que este trimestre se registrará la mayor contracción desde la II Guerra Mundial
El paquete de estímulos de un billón de dólares, casi el PIB de España, que está negociando la Administración Trump en el Congreso no parece hacer mella en el mercado. Las estadísticas no son favorables al actual presidente. En los últimos 93 años, en las trece veces que hubo un mercado bajista, sólo en dos ocasiones no hubo una recesión. Y ojo: sólo una vez el presidente ganó la reelección cuando experimentó una recesión en los dos años anteriores a una elección. Fue en la década de 1920, según Bloomberg.
Las previsiones sobre el impacto no cesan de mandar señales un tanto alarmistas. La más llamativa fue ayer la de los analistas del Deutsche Bank .“Ahora esperamos que la economía mundial incurra en una recesión profunda durante el primer semestre del 2020. Todas las principales regiones del mundo podrían experimentar las mayores disminuciones trimestrales de actividad que se registraron durante el período posterior a la era de la Segunda Guerra Mundial”. Su escenario es una caída en forma de V, pero muy pronunciada. Para la eurozona pronostican una caída abrupta del 22,4% del PIB en el segundo trimestre de este año. El banco considera que el impacto tendrá tres componentes principales: una reducción de la demanda externa, una interrupción de las cadenas de suministro y una caída de la demanda doméstica.
En este contexto, la bolsa española tampoco tuvo la fuerza necesaria para defenderse: retrocedió un 3,4% y perdió otra barrera, la de los 6.300 puntos. En la renta fija empieza a haber preocupación ante la subida de la prima de riesgo. Los bonos del Tesoro a diez años subieron hasta el 1,22%, cota de febrero del 2019. La prima de riesgo se elevó hasta 146 puntos básicos. Existe el temor de que para hacer frente al impacto del Covid-19 sea necesario un esfuerzo fiscal y un aumento de la deuda, cuando la española ya roza el 100% del PIB, y esto crea interrogantes sobre la sostenibilidad de las finanzas. En Italia se disparó hasta los 300 puntos y el Banco de Italia tuvo que intervenir con compras masivas “para asegurar condiciones ordenadas en el mercado”.
El petróleo sigue en caída libre. Los precios está en mínimos de 18 años. El de Texas registraba a media tarde un desplome de 24%, la segunda mayor caída diaria en la historia. El Brent, el de referencia en Europa, retrocedía casi un 14%, hasta poco menos de 25 dólares. Y con la población de media Europa confinada, no va a aumentar el consumo de combustible.