Un Real Madrid cargadísimo de suplentes, con solo dos titulares respecto al clásico, Tchouaméni y Nacho, sacó el partido de San Sebastián en otro ejercicio estrictamente defensivo culminado en la primera parte con un gol de Arda Güler, el segundo gol del turco en el campeonato al aprovechar un gran pase de Carvajal en una de las pocas aproximaciones de los blancos a la portería de Remiro.
Que Ancelotti solo piensa ya en Munich quedó muy claro, con Rüdiger, Bellingham, Kroos, Valverde o Vinícius en el banquillo. También, que la unidad B está comprometida con esa actitud solidaria que el equipo demostró en Manchester, donde nadie regateó un esfuerzo en correr detrás del balón.
Malas condiciones atmosféricas
Bajo una fuerte tromba de agua
El partido se jugó bajo una fuerte tromba de agua, lo que hacía la elaboración de fútbol más difícil de lo normal. La Real lucha para colarse en la Europa Liga, pero ya no es el equipo con la chispa de la primera parte de la temporada. Los de Imanol se movieron al ritmo de sus centrocampistas y tuvieron en Kubo y Barrene sus hombres mas incisivos, pero les costó mucho encontrar una rendija en la tupida defensa blanca, donde en la portería volvió Kepa y no dio sensación de seguridad.
Un remate de Kubo y otro alto de Turrientes fue lo más destacado de la Real en el primer tiempo. Tras el gol de Güler a la Real le anularon un gol de Kubo por una falta de Barrene a Tchouaméni que detectó el VAR y corroboró Munuera Montero tras consultar al monitor a pie de campo.
La segunda parte
Vinícius, Valverde y Rüdiger tuvieron minutos
La segunda parte comenzó con un remate de Turrientes y una gran parada de Kepa que evitó el empate. La jugada no tuvo continuidad por parte de la Real y el Madrid empezó a controlar el juego mucho más cómodo y más lejos de su área.
Mediado el segundo tiempo el Madrid empezó a poner titulares en acción. Valverde salió por Ceballos y Vinícius por Güler, que había sido de los mejores de su equipo. Luego entraron Rüdiger y Camavinga por Brahim y Fran García. El Madrid era más reconocible.
Oyarzabal, al que se le había anulado un gol por claro fuera de juego, tuvo una gran oportunidad en el 79, pero Rüdiger le sacó el remate en el último instante. El Madrid siguió con más cambios defensivos, con Lucas Vázquez por Modric y terminó defendiendo con tres centrales: Rüdiger, Nacho y Militao. La última ocasión fue de Camavinga. El Madrid saca ya 14 puntos de ventaja al Barcelona.
