¿Quién va a frenar a Caeleb Dressel?
Natación
El estadounidense rompe otro récord mundial de Phelps en las semifinales de los 100 m mariposa: 49s50
El reto, en esta jornada del viernes en los Mundiales de natación en Gwangju, se encontraba en las semifinales. Hemos visto a un nadador ante el resto del mundo. Como en los tiempos de Mark Spitz, que se enfrentaba a todos y en un abanico de disciplinas. O en los de Michael Phelps. Ahora, el hombre es Caeleb Dressel (22).
Decía Michael Johnson, icono del atletismo, ex plusmarquista mundial de los 200 y los 400 m:
–Para escribir una historia no basta con lograr un título. Hay que trascender.
No basta con ser el campeón de los 100 m. O el de los 200. Hay que ser ambas cosas a la vez. Si un deportista quiere trascender, debe hacer aquello que nadie había hecho antes. Carl Lewis emuló a Jesse Owens: en Los Angeles’84, fue oro en 100, 200, longitud y 4x100. Michael Phelps superó a Spitz. Firmó ocho títulos en Pekín 2008.
En Gwangju, Dressel busca el póquer de la velocidad. Ganar el 50 y el 100 libre y el 50 y el 100 mariposa.
Está a mitad de camino.
Ya ha ganado el 100 libre y el 50 mariposa.
Y visto lo visto, muy pocos lo dudan: redondeará la proeza.
En las semifinales de los 100 mariposa, le ha dado un buen bocado al récord del mundo. Se ha ido hasta 49s50, muy por debajo de los 49s82 que Phelps lucía desde hace diez años.
Y media hora más tarde volvía a abrir un cuerpo sobre sus rivales, al nadar un largo, los 50 m libre, en 21s18, a un suspiro de la plusmarca de Cesar Cielo (20s91), otra plusmarca de la década pasada que se tambalea.
Más allá de Dressel, que todo lo opaca, han pasado cosas extraordinarias. Los estadounidenses se han dado un atracón.
La adolescente Regan Smith (17) ha roto el récord de Missy Franklin en la semifinal de los 200 m espalda, al firmar 2m03s35, frente a los 2m04s06 anteriores.
Y nadando por la calle 1, lejos de las referencias, Simone Manuel ha reeditado su título del 2017 en los 100 libre, al marcar 52s04 y superar de largo (39 centésimas) a Cate Campbell y Sarah Sjöstrom.