El Atlético de Madrid ha decidido no vender entradas en zona visitante a ninguno de los socios de la grada de animación del Riyadh Air Metropolitano durante los próximos cinco partidos. En ese sector de la grada se ubican los ultras del club, que protagonizaron el lanzamiento de objetos al terreno de juego durante el último derbi madrileño.
De este modo, los aficionados que tienen su asiento en esta zona del campo colchonero no podrán comprar entradas para los partidos que el equipo disputará fuera de casa contra el Betis, el Vic, el PSG, el Mallorca y el Sparta Praga.
La entidad ha defendido en un comunicado la adopción de esta medida ante la “gravedad de la situación”. El club ha recibido dos sanciones “como consecuencia de distintos incidentes protagonizados por una pequeña minoría de aficionados”.
La medida tendrá efecto en los desplazamientos ante el Betis, el Vic, el PSG, el Mallorca y el Sparta Praga
En concreto, el Comité de Competición ha impuesto el cierre parcial del estadio rojiblanco en los próximos tres partidos del fondo sur y dos multas económicas que ascienden a 105.000 euros. De esta cantidad, 30.000 corresponden a la sanción impuesta por la UEFA debido a los saludos nazis que una parte de su afición hizo en el Estadio de la Luz contra el Benfica.
A ello se suma la propuesta de la Comisión Antiviolencia de cerrar completamente el Metropolitano durante dos semanas por los incidentes del derbi.
En el comunicado del club, denuncian que “el daño que se ha provocado a la imagen del Atlético y de su afición, que en su inmensa mayoría ha tenido un comportamiento ejemplar, es difícil de reparar”. “La gravedad del asunto y la responsabilidad de velar por la imagen de nuestro club ha obligado a la entidad a tomar esta medida mientras se identifica a todos los implicados en dichos incidentes”, añaden.
Los rojiblancos confían en que la medida “ayudará en el proceso de erradicar este tipo de actitudes”, aunque pueda ser “injusta para la gran mayoría de aficionados que se comportan correctamente”.