Diego Maradona dio ayer noche un susto al mundo del fútbol al ser ingresado en un hospital de La Plata. El gran ídolo del fútbol argentino se encuentra mejor y quiere ser dado de alta del hospital donde ingresó el lunes por anemia y deshidratación, según afirmó este martes su médico.
“Está mucho mejor que ayer, tiene muchas ganas de salir, me gustaría que hubiera un día más”, dijo Leopoldo Luque a decenas de periodistas reunidos frente a la clínica privada de La Plata, a 60 km. al sur de Buenos Aires, donde fue admitida la estrella.
Diego Maradona (c), entrenador de Gimnasia y Esgrima
“Tiene anemia, está un poco deshidratado, esto necesita ser corregido y su salud sigue mejorando”, continuó el médico, agregando que el ex campeón “durmió bien por la noche” y que “está de buen humor”. “Ante este tipo de situaciones, se necesitan unos tres días de internamiento. Ojalá quiera quedarse hasta mañana (miércoles). Ese es mi objetivo, pero él es independiente y puede salir si lo desea”, agregó el Dr. Luque.
Esta hospitalización no tiene vinculación con la pandemia del nuevo coronavirus. Maradona, técnico de Gimnasia y Esgrima La Plata, insistió el viernes en liderar el entrenamiento de sus jugadores, el día de su 60 cumpleaños, pero no parecía en buena forma y caminaba con dificultad. Solo permaneció unos minutos en el terreno de juego antes de retirarse con la ayuda de sus asistentes.
Ante este tipo de situaciones, se necesitan unos tres días de internamiento. Ojalá quiera quedarse hasta mañana”
Los aficionados del club acudieron para dejar mensajes de aliento y deseos de recuperación. “Lo que más necesita es el apoyo de la gente”, dijo el Dr. Luque. La vida del astro argentino ha estado marcada por numerosos problemas de salud, algunos de los cuales están vinculados a excesos de todo tipo que en ocasiones le han hecho coquetear con la muerte.
En 2000 sufrió un infarto tras una sobredosis en el balneario de Punta del Este. Luego siguió una larga cura en Cuba. En 2004, cuando pesaba más de 100 kg, otro infarto lo golpeó en Buenos Aires. Después se sometió a una cirugía de estómago que le permitió bajar de los 50 kg. En 2007, el consumo excesivo de alcohol lo llevó al hospital. Últimamente ha tenido que colocarse una prótesis debido a sus rodillas doloridas.