Un crespón negro en los marcadores con un fondo blaugrana y un cielo gris que amenazaba tormenta recibieron a los 48.843 aficionados que acudieron a ver el derbi barcelonés. Fue la segunda entrada más alta de la temporada. Y la máxima registrada en un partido de Liga este curso en Montjuïc. Aun así, apenas hubo jolgorio. El ambiente bajó unos decibelios. Antes y durante el partido. Situación inédita en un Barça-Espanyol y viceversa. La DANA que arrasó parte de la Comunidad Valenciana estuvo muy presente. En la grada. En la tribuna de prensa. Era inevitable pensar que no tocaba estar allí.
Lo recordaban los mensajes de LaLiga que aparecían cada dos minutos en los paneles publicitarios que rodean el verde. Recordando que la patronal, de la mano de la Cruz Roja, ha activado una línea para recaudar fondos por Bizum al número 02910. Entre los aficionados, se oían conversaciones. Había quien consideraba que este derbi no se debería haber jugado. “Pero como ya teníamos las entradas...”, apuntaban algunos aficionados. Sí hubo ausencias notables en el palco. Esta vez, ni el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ni Salvador Illa, presidente de la Generalitat, acudieron al campo. Cuando el temporal acecha, hay tareas más importantes que ir a ver el fútbol.
En los marcadores del estadio se mostraron las líneas de ayuda que LaLiga ha establecido con la Cruz Roja
Fuera de Montjuïc, la solidaridad de la Curva, grupo de animación del Espanyol, desbordaba sus previsiones. Lo que empezó con la idea de alquilar una furgoneta con provisiones para ayudar a las víctimas terminó con cuatro tráilers con ayuda para los afectados. Sobrepasados ante la ola de solidaridad, la Curva tuvo que avisar para que la gente dejara de acudir a la puerta nueve del estadio de Cornellà con provisiones. Alimentos no perecederos, agua, leche y productos sanitarios de primera necesidad. Hoy los cuatro tráilers saldrán hacia València.
Hoy, cuatro tráilers con ayuda organizados por la afición del Espanyol saldrán hacia València
Por parte del FC Barcelona, su fundación está trabajando para apoyar a la población afectada. Para empezar, el club anunció que subastará las camisetas de los jugadores que disputaron el derbi para recaudar fondos. “También se ha facilitado un listado con varias líneas de ayuda ”, señaló antes del encuentro el locutor Bernat Gascón mientras los marcadores del estadio ofrecían toda la información. Para evitar colapsar los canales de emergencias y queriendo canalizar toda la ola solidaria barcelonista mediante su fundación, el club no autorizó a la grada de animación a habilitar un punto de recogida de provisiones en los aledaños Montjuïc.
Hubo un momento de silencio antes de que empezara a rodar el balón, bajo la melodía del Cant dels ocells . Especialmente tocado estaba el jugador del Espanyol Carlos Romero, natural de Torrent. El otro jugador del Barça valenciano está lesionado. Pero ayer no se vio con fuerzas para ir al estadio. Se trata de Ferran Torres. “No tengo fuerzas de ir a ver a mis compañeros. Frustración e indignación con nuestros gobernantes, sean unos u otros. El Estado está fallido”, denunció el de Foios en sus redes sociales.
A diferencia de lo que sucedió en estadios como Montilivi, el Metropolitano o El Sadar, no hubo camisetas de apoyo. Después Olmo y Puado sí quisieron recordarles con un mensaje: “No tendríamos que haber jugado”.