Ousmane Dembélé llegó el domingo a Barcelona para quedarse después de haber alcanzado un principio de acuerdo con el Barça para firmar hasta 2024. Aunque ambas partes están terminando de pulir algunos detalles contractuales Dembélé ya se ha dejado ver este martes por la tarde por la ciudad deportiva para entrenar con el grupo. Unos stories de Aubameyang en Instagram revelaron su presencia en el vestuario sentado entre sus vecinos de taquilla, Kessie y Umtiti. Se espera que este miércoles se oficialice su continuidad después de meses de negociaciones con muchos altibajos.
Ambas partes han llegado a un acuerdo para cerrar su nuevo contrato con una rebaja salarial del 40 por ciento del fijo respecto a su último vínculo, que finalizó el pasado 30 de junio por lo que su continuidad computa como un nuevo fichaje. El cumplimiento de los incentivos del nuevo contrato podrían garantizarle acabar percibiendo una cantidad cercana al salario base anterior. El club tampoco cumplirá con las altas expectativas económicas que solicitaba su representante, Moussa Sissoko que pedía una elevada prima de renovación.
Hasta 2024
Se espera que esta semana se oficialice su continuidad
El serial ha pasado por varias fases. En enero, después de que en las reuniones mantenidas entre Sissoko y el Barça no se llegara a ningún acuerdo para continuar, el director de fútbol, Mateu Alemany, comunicó públicamente que sus agentes “no han respondido a nuestra oferta. Ante este escenario se le ha comunicado a él y a sus agentes que debe salir de forma inmediata. Esperamos un traspaso antes del 31 de enero”. El francés, que coqueteó con el PSG, no llegó a ninguna entente. Y Xavi (otra vez) intervino para recuperarle después de perderse un partido de Liga y el de Copa en el que el Barça cayó eliminado contra el Athletic.
A pesar de que fue un mes complicado, la realidad es que Dembélé es ahora un futbolista feliz e integrado en la plantilla. Su entorno asegura que su voluntad siempre fue la de seguir y que se encuentra muy satisfecho con poder seguir vistiendo la camiseta azulgrana. La plantilla blaugrana también ha ayudado. Veteranos como Piqué, Alba o Busquets, además de jóvenes como Pedri, se pronunciaron públicamente a favor de su continuidad y la llegada en enero de su amigo Aubameyang, con quien coincidió en el Dortmund, también sumó. Pero ha sido sobre todo la confianza en él del staff técnico lo que ha hecho virar la voluntad del francés respecto al Barça en su ya quinta temporada.
Físicamente Dembélé también ha mejorado. Ha dejado atrás las lesiones. Al margen de haber aprendido a escuchar mejor a su cuerpo, ha encontrado en el doctor Ricard Pruna un aliado comprensivo y eficiente. Técnicamente, desde la ciudad deportiva se subraya que Dembélé ha evolucionado gracias a los vídeos para familiarizarse con el sistema y con el modelo de juego. Ambos aspectos han sido definitivos para convencerle de que su sitio está en Barcelona pese a contar con ofertas económicas mucho más elevadas. El Bayern, el Chelsea y el PSG fueron algunos de los clubs que se interesaron por su posible incorporación.