El crecimiento exponencial de Messi en los lanzamientos de falta
Gráfico
El argentino, ya con 50 goles en su haber, empezó a ser una amenaza real a partir de la temporada 2015/16
La historia del fútbol ha dejado para la posteridad lanzadores de falta exquisitos. Los primeros nombres que a uno se le pasan por la cabeza son los de Juninho Pernambucano, Ronaldinho, Sinisa Mihajlovic o David Beckham, aunque en otra época ya se salían del guión hombres como Pelé, Zico o Víctor Legrotaglie, especialista este último en goles olímpicos –llegó a anotar hasta doce desde el córner–.
Por unanimidad es un argentino como Legrotaglie el que marca la pauta en la actualidad cuando de por medio hay un balón plantado cerca del área y una barrera. Leo Messi alcanzó este martes los 50 goles de libre directo, cifra sólo al alcance de los jugadores antes mencionados, con Juninho como referente (77 contabilizados). Fue en una nueva exhibición, esta vez contra el Valladolid en Liga, marcando dos goles y repartiendo otros dos.
Los otros 6, con Argentina
Con el Barça ha anotado 26 de sus 44 goles de libre directo en los últimos cuatro años
Su ejecución perfecta a la escuadra de la portería de Masip sirvió para sumar medio centenar de goles de este modo, 44 de los cuales anotados con el Barça. Los otros seis llegaron vistiendo la albiceleste. Ahora mismo Messi no tiene rival en los lanzamientos de falta, pero no siempre fue así.
En sus primeros años en la élite era prácticamente imposible que pudiera lanzarlas. Compartía vestuario con un maestro como Ronaldinho. Era el brasileño quien acaparaba los tiros, y con razón. Sus números a balón parado fueron los únicos que no se resintieron de su bajón en sus últimas temporadas en el club catalán. Cuando Ronaldinho se fue, Messi empezó a asomar la cabeza aunque durante varios años se repartió la responsabilidad con otros compañeros como Henry, Xavi o Iniesta.
Según datos de Opta, no fue hasta la temporada 2011/12 cuando cargó con el peso de los libres directos: lanzó 55 veces, cuatro más que en las siete temporadas anteriores juntas. Acababa los cursos transformando alguno de ellos, pero sin ser cifras intimidadoras. Siempre se ha dicho que fue Maradona quien le enseñó a golpear el balón en el Mundial 2010, pero lo cierto es que Messi empezó a ser una amenaza real a partir de la temporada 2015/16.
En esa marcó por primera vez siete goles, una cifra que repetiría la 2017/18 y superaría la 2018/19, con ocho, con el mejor ratio de efectividad de su carrera (13,55%) al lograrlos en 59 intentos. En total, 26 dianas en cuatro años.
Dos en un mismo partido
El Espanyol es su víctima favorita con seis tantos
33 de los goles llevan su firma en la Liga, cinco en la Champions, tres en la Copa del Rey, dos en la Supercopa de Europa y uno en la Supercopa de España. Con Argentina, tres los convirtió en fases de clasificación de Mundiales, dos en la Copa América y uno en el Mundial 2010.
La víctima favorita de Messi es el Espanyol, al que le ha marcado seis tantos. Dos llegaron en un mismo partido, en Cornellà el año pasado. En esa ocasión el rosarino rozó el hat-trick. A Sevilla y Athletic les ha superado cinco veces, tres al Atlético de Madrid y dos al Real Madrid. En enero del 2017 igualaba con 25 goles a Ronald Koeman como máximo goleador de faltas de la historia del Barça. En menos de tres años ha sumado 19 más como blaugrana, dos de ellos en este inicio de curso complicado por las lesiones’. ¿Cuál será su límite?