Landa no puede con el pequeño caníbal Evenepoel en la Vuelta a Burgos
Vuelta a Burgos | 5ª Etapa
El joven ciclista belga gana la carrera e Iván Ramiro Sosa se lleva la última etapa con un duro final en Lagunas de Neila
Mikel Landa (Bahrain) se topó en la Vuelta a Burgos con un gran Remco Evenepoel (Deceunick-Quick Step) que defendió el liderato sin fisuras en la última etapa y se llevó el triunfo final. El belga compartió la durísima subida final a Lagunas de Neila junto al vasco y el colombiano Iván Ramiro Sosa, de 22 años, que finalmente se llevó el triunfo de etapa con un ataque a 500 metros de la llegada a meta.
“La subida ha sido muy dura, la altitud no es mi fuerte. He sufrido. El equipo me ha mantenido en todo momento informado. He mantenido a Landa en mi visión, por lo que estoy muy contento”, explicó Evenepoel, de 20 años, que en junio de 2019 ganó su primera etapa como profesional en la Vuelta a Bélgica y posteriormente se ha impuesto en la Clásica de San Sebastián, la Vuelta a San Juan (Argentina) y la Vuelta al Algarve (Portugal).
Sobre Evenepoel
“Viene gente joven pegando muy fuerte. Hay que aprovechar antes de que cojan experiencia porque después será imposible”
Mikel Landa
Corredor del Bahrain
“Mucho nivel. Viene gente joven pegando muy fuerte. Hay que aprovechar antes de que cojan experiencia porque después será imposible. Evenepoel es valiente, muy completo y sorprende porque se maneja bien en todos los terrenos”, indicó Landa sobre el pequeño ‘caníbal’, Sosa y el portugués Joao Almeida, de 21 años, que tras un gran ascenso final se aupó a la tercera plaza de la general.
Evenepoel ya había demostrado ser un gran rodador, muy bueno en contrarreloj, pero en la tercera etapa de la carrera burgalesa se destapó como un superclase ganando la etapa con la ascensión al Picón Blanco, donde superó a todos los escaladores. Cuando pula sus pecados de juventud será el rival a batir en el pelotón.
El pequeño caníbal, apodo en homenaje a su compatriota y leyenda Eddy Merckx, se creció en los kilómetros finales y quiso dejar atrás a Landa y Ramiro, pero las duras rampas del 11% pudieron con su ambición. De nuevo en el redil, pagó la osadía en el kilómetro final cuando no tuvo fuerzas para seguir a Sosa y Landa, que, más experimentado, guardó fuerzas para arrancarle unos segundos antes de meta, aunque insuficientes para recortar los 32 de margen que tenía Evenepoel.
Por su parte, Sosa completó unos últimos metros soberbios después de una dura etapa de 158 kilómetros. El colombiano del Ineos entró totalmente en solitario en la meta y se llevó por tercer año consecutivo el triunfo de etapa en Laguna de Neila. El gran perjudicado de la jornada fue el neozelandés George Bennett, que partía segundo en la general y se cayó del podio en la dura ascensión final.