Los 'boxeadores' de la batalla campal del Madrid-Partizan se enfrentan hasta a 4 años sin jugar
21 descalificados
La Euroliga, que condenó "enérgicamente" el altercado multitudinario del WiZink Center, debe anunciar hoy las sanciones
La Euroliga de baloncesto ha condenado "enérgicamente" los hechos ocurridos al final del segundo partido de la serie de playoffs entre el Real Madrid y el Partizan de Belgrado, que motivaron la finalización del encuentro cuando aún restaba un minuto y 40 segundos por jugar, con 80-95 en el marcador. En la tangana final, los árbitros descalificaron a 21 jugadores, que se enfrentan a posibles sanciones contundentes: de uno a cuatro años de suspensión, o más de tres partidos.
El Real Madrid pierde por 0-2 la serie, que se desplaza a Belgrado, en principio, el martes a las 20.30 h. El ganador de este curto de final entre españoles y serbios será el rival del Barça-Zalgiris (que podría verse beneficiado por las sanciones del rival).
La razón de la suspensión
La Euroliga dio por finalizado el encuentro a falta de 1m40s "porque ninguno de los dos equipos tenía un mínimo requerido de dos jugadores para terminar"
En un comunicado, la Euroliga indica que en el tramo final del encuentro ocurrió un altercado en la cancha entre jugadores de ambos equipos y la mayoría de los banquillos se vaciaron para entrar en la pista y sumarse a la pelea.
"Cuando se aplicaron descalificaciones para aquellos jugadores que participaron en el altercado y aquellos expulsados automáticamente por abandonar el área de banca, ninguno de los equipos tenía el mínimo requerido de dos jugadores cada uno para terminar el partido; por lo que el encuentro se considera oficialmente terminado con el marcador en ese momento detenido, 80-95 a favor del Partizan, que ahora lidera la serie 2-0".
En la nota se informa de que la Euroliga de baloncesto "ha remitido los hechos denunciados al Juez Disciplinario Independiente de la Euroliga, quien dictará resolución sobre las incidencias en pista de acuerdo con los procedimientos establecidos, en las siguientes 24 horas.
La Euroliga "condena enérgicamente los hechos ocurridos al final del partido. Dichos eventos no representan los valores de respeto que la liga y sus clubes promueven y que encarna el deporte del baloncesto".
Todo empezó por una falta antideportiva de Sergio Llull a Kevin Punter, que suelta el balón y se encara con el mallorquín y le levanta el puño. Yabusele, Dante Exum y Gabriel Deck corren hacia ellos. Exum empuja a Llull, Deck agarra por la espalda al australiano y este forcejea con el argentino. Yabusele agarra a Exum y le hace una llave de judo tumbándolo en el suelo, luego Punter golpea en la cara a Musa... En la trifulca hay muchos jugadores implicados: Llull, Punter, Exum, Lessott, Deck, Musa, Hezonja y Yabusele.
Tras la revisión de las imágenes durante más de diez minutos, la deliberación arbitral se formó un cónclave entre estos y entrenadores -Obradovic y Chus Mateo- para que el árbitro principal Radovic pusiera fin al partido a falta de un minuto y cuarenta segundos por la pelea.
Posibles sanciones
Si se considera "infracción grave", los castigos pueden ir de 30.000 a 280.000 euros de multa y la prohibición de jugar en la Euroliga de uno a cuatro años, o incluso la descalificación permanente
Según establece el reglamento de la Euroliga, los jugadores que saltaron a la pista desde el banquillo pasan a estar descalificados (como si recibiesen una quinta falta personal), por lo que no se les penalizaría para próximos partidos.
Sin embargo, en el caso de los ocho jugadores que recibieron la falta descalificante cuando estaban en pista y a juicio de los árbitros formaron parte de la pelea (Musa, Hezonja, Deck y Yabusele por parte del Real Madrid y Punter, Exum, Lessort y Nunnally del Partizan) les pueden caer partidos de sanción o multa económica si lo considera el Juez Independiente de la Euroliga.
Dependiendo del grado de la infracción (leve o grave), la sanción será menor o mayor. Así, el artículo 27.1 del reglamento de la Euroliga considera infracciones graves "la agresión física a un miembro del equipo arbitral, a otro jugador, a un aficionado o a cualquier persona en general".
También son "infracciones graves" las "acciones amenazantes, humillantes o degradantes hacia un miembro del equipo arbitral, otro jugador, un aficionado o cualquier persona en general", así como "acciones discriminatorias de palabra o de hecho" y "todos los actos y cualquier tipo de conducta que directa o indirectamente conduzcan o induzcan a la violencia".
El castigo que fija la Euroliga para las sanciones graves son una multa de 30.001 euros a 280.000 euros, la prohibición participar en competiciones de la Euroliga de uno a cuatro años, o por tres o más partidos. E incluso una descalificación permanente de la Euroliga.
Yabusele sería el jugador con más números para recibir una sanción ejemplarizante, pero también podrían tener un castigo severo por infracción grave Punter, Exum, Lessort y Deck.
Si la infracción es "leve"
La Euroliga puede castigar al "infractor leve" con castigos de van desde la multa de hasta 30.000 euros a descalificación temporal por un año o un máximo de 5 partidos
En el caso de que la infracción sea considerada "leve" por el Juez Independiente, el castigo puede ir desde un apercibimiento, a una multa de hasta 30.000 euros, o la prohibición de participación en competiciones de la Euroliga por un período de hasta un año, e incluso descalificación temporal de la competición de hasta un año o por un máximo de cinco partidos.
Chus Mateo
El técnico madridista atribuye el dantesco espectáculo a "la frustración que nos ha hecho perder los nervios"
Sobre la tangana final, el técnico madridista, Chus Mateo,"el equipo contrario ha sido muy incisivo y la frustración nos ha hecho perder los nervios. Esto es un deporte y no nos gusta ver lo que ha pasado. Con esa frustración y calentura es difícil estar calmado", apuntó.
"Hay que bajar un poco las pulsaciones, los jugadores han hablado aquí en el vestuario y todos se han calmado. Por normativa salir del banquillo significa que están descalificados. También había alguna descalificante por otros motivos. Eso es lo que nos han dicho los árbitros al final. Espero que esto no llegue a más. Todos pedimos disculpas. También el Partizan. Hay que ponerse en la piel de los jugadores y saber a que pulsaciones están", reflexionó.
"Me preocupan no solo por las sanciones. Estamos intentando recomponernos del calendario, y muchos jugadores que están entrando y saliendo. Ojalá que no haya sanciones y no perdamos alguna pieza más", finalizó Chus Mateo en declaraciones recogidas por Efe.